El presidente municipal de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, confirmó que algunos policías de la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano de Cuernavaca (Seprac) fueron separados de su cargo por faltas administrativas y no por presuntos vínculos con la delincuencia organizada.
Cuando un policía es señalado en narcomantas se abre una carpeta de investigación ante la Fiscalía General del Estado (FGE), pero no se han encontrado elementos de prueba para asegurar que los oficiales tienen vínculos con los grupos delincuenciales, aclaró.
“Hay muchos rumores sobre la infiltración de muchos elementos de la policía con la delincuencia organizada, o viceversa, delincuentes que están dentro de la policía y por eso es la investigación que tiene que seguirse por parte del Ministerio Público (MP) y de Asuntos Internos.
Sobre el ataque al personal de una funeraria la noche del lunes en Guacamayas, Urióstegui Salgado calificó como “algo raro”, y señaló que la carroza presenta varios impactos de arma de fuego, por lo que la persona lesionada fue trasladada a un hospital para su atención.
El edil capitalino negó que el elemento privado de la vida la mañana del lunes estuviera desarmado y los familiares del elemento asesinado recibirán apoyo jurídico y psicológico.