El hospital central del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM), el más grande de la entidad, se encuentra al borde de una huelga. Médicos, enfermeras y personal administrativo denuncian malos manejos, negligencia y trato inhumano por parte de la dirección y, en particular, de la Unidad Jurídica Consultiva y de Igualdad de Género.
La situación se tornó crítica tras la renuncia del director del hospital, quien abandonó el cargo después de recibir multas económicas derivadas de juicios de los que, según denuncias, nunca fue notificado. El temor a enfrentar sanciones similares ha provocado que ningún médico acepte asumir la dirección.
El enojo de los trabajadores se centra en la actuación de Guadalupe Ruiz, titular de la Unidad Jurídica, designada por el director general Ignacio Salgado García, presuntamente a instancias de la gobernadora Delfina Gómez Álvarez. De acuerdo con los empleados, esta oficina abandona a los médicos en procesos legales, omite notificaciones y prioriza únicamente los casos de pensiones que, acusan, benefician a despachos cercanos al director general.
Estas denuncias chocan con el reciente discurso de la gobernadora, quien apenas la semana pasada subrayó que “los trabajadores de la salud son el rostro humano del gobierno”. El personal se pregunta si esas palabras se quedarán en el aire mientras el hospital más importante para los servidores públicos del estado se hunde en el caos.
Ante este panorama, los trabajadores advierten que la huelga es inminente si no hay una intervención directa para destituir a los responsables y frenar lo que califican como un abandono institucional sin precedentes.