En la infraestructura hídrica del país, Rotoplas, reconocida por sus tinacos y cisternas, se ha consolidado como actor clave gracias a su sistema Tuboplus, que optimiza los proyectos arquitectónicos y promete un futuro más sostenible para la edificación, justo cuando el sector de la construcción busca soluciones para mitigar su impacto ambiental.
Fabricado en Polipropileno Random (PPR), el sistema disminuye cargas estructurales por ser altamente ligero; además, resiste la corrosión y está diseñado para alcanzar una vida útil de hasta 50 años.
La experiencia en obras mayores lo ilustra: en el Hospital ISSSTE de Los Cabos, la colocación del sistema fue hasta 50% más rápida respecto de métodos tradicionales, con avances diarios de hasta 200 metros, lo que traduce la innovación en eficiencia tangible.
El enfoque ambiental está integrado desde la planta hasta el fin de vida del producto. Tuboplus se fabrica con energía 100% solar, una práctica poco común en la industria y, mediante procesos de manufactura, el agua utilizada se recircula por completo para evitar desperdicios, lo que reduce la huella de carbono.
Según un estudio de KPMG, el 82% de los directivos de empresas de construcción en América Latina consideran que la sostenibilidad es un factor clave para la competitividad.
“Hoy en día, implementar prácticas sustentables no solo es una obligación ética, sino que también tiene un impacto directo en los resultados económicos, ya que reduce costos operativos a largo plazo y mejora la imagen corporativa”, explica Alejandro Segovia, director de la Unidad de Negocios México y Centroamérica de Rotoplas.
Elegir materiales como Tuboplus se alinea con esa tendencia: permite a las constructoras disminuir el uso de insumos adicionales, recortar la generación de residuos y contener los costos de mantenimiento a lo largo del tiempo.
Ya en operación, el cuidado de recursos se mantiene. Las uniones por termofusión forman sellos herméticos que eliminan fugas de agua y, al concluir su ciclo, el material puede reciclarse al 100%, aportando a una economía circular en la que los recursos se reincorporan.
“En un mundo que exige soluciones tangibles para el cambio climático, Tuboplus de Rotoplas no es solo un producto, es una declaración de intenciones. Es la prueba de que se puede construir de manera más rápida y eficiente sin sacrificar la responsabilidad ambiental. Es una apuesta por un futuro donde la construcción no solo se alza, sino que también cuida al planeta”, finaliza el directivo de Rotoplas.