El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, publicó un decreto por el que asume el mando de la seguridad pública municipal de la capital del estado, en virtud de que ocurren circunstancias de alteración grave del orden público.
El documento establece que durará el tiempo que sea necesario hasta que se restablezca el orden público y se pueda garantizar la seguridad de las personas, sus bienes y sus derechos.
“En el ámbito de la seguridad pública, el Ayuntamiento de Puebla requiere una estrategia real y contundente, con labor permanente bajo un modelo que contemple la depuración policial, mejorar los procesos de reclutamiento y permanencia, orientados con un sentido de acción sin contemplaciones”, argumentó.
Aseguró que la seguridad de la capital del estado necesita rigidez en sus procesos, alejados de omisiones, políticas públicas inciertas y abandono de los mecanismos más básicos de control en las corporaciones, en donde se han presentado casos que exhiben la ausencia de valores y ética policial.
“Es innegable el contexto de inseguridad que se registra en las zonas de mercados municipales, en donde la delincuencia común ha transitado hacia verdaderas organizaciones delincuenciales, dedicadas a la venta de drogas, cobro de piso a comerciantes y ambulantes, prostitución, robos, venta de productos robados, pornografía, entre otros ilícitos”.
Destacó que las redes criminales han crecido a un ritmo acelerado, por lo cual actualmente gozan de impunidad y un alto poder de organización, armas de fuego y vinculación con otras células delictivas importantes, lo cual ha permitido, rebase las capacidades del ámbito municipal.
“Más allá de la incidencia de delitos comunes, se han registrado ejecuciones, cuerpos abandonados, feminicidios, una cifra considerable de robos, lo cual ha generado un contexto de inseguridad, totalmente perceptible para la sociedad y desfavorable a la acción institucional, lo que permite afirmar que la labor de prevención es prácticamente nula”, sostuvo.
Operan Zetas y Familia Michoacana en Puebla
Advirtió que fuentes de seguridad refieren que Los Zetas y Familia Michoacana, registran operaciones sólidas en los últimos años en Puebla; mientras que Los Beltrán Leyva y Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), tiene algunas células criminales ligadas a éstos en la entidad, en municipios como Palmar de Bravo, Cañada Morelos, Ciudad de Puebla, San Andrés Cholula y San Martín Texmelucan.
Apuntó que en 2019 se registró un incremento de 25 por ciento en la incidencia delictiva en el municipio, toda vez que se registraron 76 mil 557 delitos generales, mientras en el mismo periodo de 2018, se contabilizaron 61 mil 172 casos.
Al respecto en conferencia de prensa, el mandatario estatal argumentó que más allá de la controversia constitucional que el ayuntamiento interpuso, tomó la decisión de controlar los cuerpos de seguridad.
“Nada han hecho, no participan en nada, se dedican sólo a administrar los asuntos de seguridad pública en el municipio, pero nada hacen por resolverlo, yo no voy a detenerme, con mando o sin mando, no voy a detenerme”, aseguró.
Dijo que hasta el momento no han sido emplazados por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) pero una vez que reciba la notificación tendrán un plazo de 30 días para responder, con las argumentaciones técnicas, materiales que llevó al gobierno a tomar esta decisión.
Con información y fotografía del Gobierno del Estado de Puebla.