Se han convertido en una estampa tradicional del zócalo municipal de Oaxaca, desde temprana hora llegan con sus sillas y su equipo para lustrar y dar brillo a los zapatos de lugareños y turistas.
Sin embargo, los más de 80 boleros del Zócalo y la Alameda de León ahora brillan por su ausencia, pues las autoridades les pidieron quedarse en sus casas, ante la propagación del Coronavirus COVID-19 en el municipio.
“Entendemos la emergencia que está sucediendo a nivel mundial, no lo negamos, conocemos los riesgos, pero si nosotros no venimos a trabajar, no podemos llevar a nuestras casas lo necesario”, expresaron.
Este domingo, el zócalo oaxaqueño luce semivacío, la mayoría de los locatarios cerraron sus cortinas y la alegría y risas de niños corriendo, y la imagen de los turistas caminando y tomando fotos quedó en el recuerdo.
Y es que ayer, en Sesión Extraordinaria de Cabildo, vía videoconferencia, las y los concejales aprobaron un punto de acuerdo del presidente municipal, Oswaldo García Jarquín, con medidas adicionales ante la pandemia.
Los establecimientos comerciales deberán suspender sus actividades, a excepción de aquellos que por la naturaleza de su funcionamiento resulten esenciales, hasta el 30 de abril.
En ese sentido, la Subdirección de Regulación de la Actividad en Vía Pública de la Dirección de Gobierno, entregó apoyos alimentarios a los 80 aseadores de calzado.
De acuerdo con el municipio, esta ayuda se brindará durante el periodo de contingencia, ya que debido a las medidas establecidas para frenar la cadena de contagios de Covid-19, ellos también deberán quedarse en casa.
El secretario general de la Unión de Aseadores de Calzado del Zócalo de la Ciudad de Oaxaca, Sergio Gil Hernández Alvarado, señaló que los trabajadores de limpieza de calzado viven al día.
Reconoció que es necesario acatar las disposiciones que han emitido las autoridades tanto federales, estatales y del ayuntamiento, ante esta contingencia sanitaria.
Con información y fotografías del Ayuntamiento de Oaxaca.