La vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Dolores Padierna, demandó al expresidente Felipe Calderón y exfuncionarios rendir cuentas ante la justicia mexicana por su presunta responsabilidad en el operativo “Rápido y Furioso”, por el que se introdujeron miles de armas a territorio mexicano y con las que se cometieron diversos delitos en ambos lados de la frontera.
La parlamentaria de Morena llamó a que también rinda cuentas el ex procurador General de la República, Eduardo Medina Mora; y el entonces director de la Agencia Federal de Investigación (AFI), Genaro García Luna, actualmente preso en Estados Unidos.
Apuntó que informes de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de Estados Unidos (ATF), refieren que entre 2006 y 2010 miles de armas estadounidenses fueron introducidas a México de forma “legal”, como parte de un acuerdo entre las autoridades de ambas naciones para rastrear su destino final.
Padierna sostuvo que cuando Medina Mora fue titular de la PGR tuvo conocimiento de esa situación, y “esto lo dice la información de la ATF, de que Estados Unidos estaba desarrollando una estrategia denominada ‘dejar que caminen las armas’, que consistía en permitir su ingreso ilegal a México para después rastrearlas y ubicar así a los capos y células del narcotráfico.
“Ese fue el antecedente del fallido operativo ‘Rápido y Furioso’ que conoció Medina Mora. Los resultados han sido severamente cuestionados por las autoridades de Estados Unidos que abrieron diversas investigaciones en contra de quienes diseñaron y aplicaron dicho operativo, quienes recibieron severas sanciones”, subrayó.
Sin embargo, reprochó que en México apenas se han discutido sus implicaciones y sus consecuencias, “no hay fincamiento de responsabilidades contra nadie”.
Expuso que mientras Felipe Calderón siempre ha dicho que no tuvo conocimiento de esos programas, está documentado por el gobierno estadounidense que desde el 2007 y hasta 2010 las autoridades mexicanas facilitaron el ingreso de armas al país, mismas que agravaron la crisis de seguridad y derechos humanos en territorio nacional.
Advirtió que, adicionalmente, hay una carpeta enorme de documentos desclasificados sobre el operativo “Rápido y Furioso” que fueron integrados por el Comité de Investigación del Congreso estadounidense, los cuales refieren el intercambio de información que hubo con autoridades mexicanas.
“Hay incluso un memorándum fechado en enero de 2008 donde se señala que la ATF llevó a cabo conversaciones con los más altos funcionarios del gobierno de México respecto a la descentralización del proceso de rastreo de armas de fuego”, acotó.
Dijo que cuando Medina Mora se propuso para ser ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), se abrieron carpetas llenas de información que tienen en Estados Unidos.
Anotó que hay un informe que data del 2010 de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito, en el que se afirma que circulaba una gran cantidad de armas, suficientes como para armar al 30 por ciento de la población en México.
Indicó que en el país se estima que hay 15 millones de armas circulando, de las cuales el 85 por ciento tiene una procedencia ilegal y el 70 por ciento de las armas decomisadas entre 2009 y 2010 llegaron de Estados Unidos.
Con información de Central Municipal.
Fotografía de portada: Cámara de Diputados.