Dice el dicho que mal empieza la semana para quien ahorcan en lunes. Y ese es justamente el panorama que enfrentó el presidente López Obrador en su primera entrevista con Joe Biden.
Y como parte de esos “gajes del oficio”, debe resaltarse que los términos diplomáticos del comunicado conjunto, luego de la entrevista entre los mandatarios de México y Estados Unidos, no alcanzan a ocultar las diferentes visiones que tienen los ejecutivos de las dos naciones.
Por más que la secretaria de Economía considere que la reunión virtual realizada esta tarde entre los equipos del presidente Andrés Manuel López Obrador y su homólogo de Estados Unidos Joe Biden, fue muy cordial, con muchos acuerdos “y muy bonita”, lo cierto es que ambas partes fijaron con claridad sus posiciones, no siempre convergentes.
Así quedó plasmado en el documento oficial que se dio a conocer, en donde se resalta que “los dos presidentes destacaron la importancia de enfrentar la crisis climática y acordaron explorar áreas de cooperación. Los líderes reconocieron los beneficios de reducir los contaminantes climáticos de corta duración, así como la necesidad de promover la eficiencia energética”.
Este último concepto, es totalmente opuesto a la propuesta del gobierno lopezobradoriano de limitar la generación de energías limpias, eólica y solar, y de otorgar preferencia a la Comisión Federal de Electricidad en la producción y despacho de la misma, basada en fuentes fósiles, altamente contaminantes y más caras.
El énfasis que se da a los asuntos medioambientales pone de relieve que si no se le cambia ni una coma a la nueva Ley de la Industria Eléctrica, que se discutirá en el Senado esta semana, deberán asumirse las consecuencias, ya que Estados Unidos, con todo respeto a la soberanía de México, defenderá los intereses de los empresarios de su país.
Previo a la entrevista, la vocera de la Casa Blanca, informó que “el presidente (Biden) ha dejado en claro que está enfocado en que las vacunas sean accesibles a todos los estadounidenses. Ese es nuestro enfoque; una vez logrado ese objetivo, estaremos felices de poder discutir otros pasos”.
De acuerdo con la versión mexicana, Biden sostuvo que Estados Unidos y México son más fuertes juntos. Que no siempre fueron los mejores vecinos, pero se ha comprobado que cuando cooperan juntos avanzan ambos países.
La negativa que tuvieron las solicitudes del ejecutivo mexicano para que se abrieran las fronteras a paisanos para ir a trabajar a EU y del préstamo de vacunas contra el Covid-19, así como la velada advertencia en materia energética explican el tono desgajado de López Obrador al decir: Porfirio Díaz, decía ‘Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos’ y ahora puedo decir ‘Bendito México, tan cerca de Dios y no tan lejos de Estados Unidos‘”.
Es decir, para López Obrador es mejor que México esté no tan lejos que cerca de su vecino del norte.
He dicho.
EFECTO DOMINÓ
La tendencia acumulativa de reveses de parte del gobierno cuatroteísta se mantiene inalterada durante los dos primeros meses de 2021; más que una excepción, los yerros se han vuelto una constante, por lo que considerar “gajes del oficio” el descontento social existente entre un mayor número de grupos sociales y que le externan al presidente López Obrador, es pretender trivializar las protestas.