Tatiana Ortiz Galicia, medallista de bronce olímpica en la prueba de clavados sincronizados en la plataforma de 10 metros, en Beijing 2008, demostró la fortaleza que posee desde pequeña al enfrentar desafíos desde su infancia hasta llegar a tocar el bronce olímpico, deseando ser un ejemplo para las futuras generaciones.
“Significa una gran responsabilidad, sobre todo para ir dando el ejemplo a las nuevas generaciones, pero también significa que, si una persona o una mujer ya lo pudo lograr, cualquier mujer o niña que tenga un sueño lo puede conseguir.
“También viene esa parte de ser una figura que inspira, haber conseguido este objetivo en un país en el que todavía hay muchos temas de género en los que tenemos que trabajar”, afirmó Ortiz Galicia.
La ganadora del bronce hace ya 12 años en territorio Chino, reconoció la labor de Paola Espinoza, su compañera de aquel día en Beijing, juntas abrieron brecha para que clavadistas mexicanas compitieran a los más altos niveles, desafió que se complicó pues los apoyos en aquel entonces eran escasos para dicho deporte.
“A mí sí me tocó la parte que apenas estaba iniciando, sí tuvimos apoyo, obviamente, ahorita todo ha ido avanzando, el tema de la publicidad, de patrocinadores, ha ido avanzando conforme también ha ido avanzando el tema de redes sociales, pero a mí me tocó a los inicios y nos tocó ir abriendo camino para que las generaciones de ahora puedan tener mejores condiciones que las que tuvimos nosotras”, declaró Ortiz.
Por si fuera poco, en el equipo de Ortiz y Espinoza se encontraba la entrenadora china Ma Jin, quien también hizo historia al ser la primera entrenadora femenina en colocar a sus pupilas en puestos de medalla olímpica, hecho que significó que la clavadista originaria de la CDMX se convirtiera en un símbolo femenil.
Lo haces de forma empírica, pero obviamente vas haciendo conciencia de cada uno de los logros que vas teniendo, nace de un sueño, de un objetivo que pueden nacer en el interior de tu núcleo familiar y poco a poco se va replicando en tu estado, en tu país y luego te das cuenta de que tienes un impacto a nivel mundial, pero vas haciendo conciencia, vas analizando, ves que abriste camino, que dejaste un precedente porque después de las Olimpiadas del 2008 hubo otras dos medallas para mujeres en la siguiente edición de los Juegos Olímpicos, se va haciendo el camino para las siguientes generaciones”, puntualizó.