Bajo el argumento de que no hay que satanizar, el senador de Morena, Julio Menchaca Salazar, reconoció que utilizó un avión privado para asistir a la toma de protesta de Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa, el pasado 30 de octubre.
Contrario a la política de austeridad del presidente Andrés Manuel López Obrador, el senador por Hidalgo dijo que no hay que satanizar, porque también hay taxis aéreos.
Sin embargo, aceptó que en el caso de la toma de protesta del gobernador de Sinaloa, “coincidió que un grupo de amigos, invitados por él a la toma de protesta, salieron de Pachuca y efectivamente me dieron un ride”.
De acuerdo con un video difundido en redes sociales, Menchaca Salazar comentó que varios senadores tienen un jet porque son empresarios y son empresarios progresistas que apoyaron a AMLO, son personas que tienen un patrimonio formal en el trabajo, formal en su esfuerzo, aseguró.
En su opinión, alguien podrá tener la disposición presupuestaria de comprarse una suburban, alguien para un Volkswagen “y son muy sus recursos”, y también hay servicio de taxis aéreos y no es un pecado.
“Malo la utilización de los recursos públicos, el que se desvíe dinero para hacer cosas que no corresponden, pero cuando corresponden al patrimonio personal es muy respetable quien quiera hacer uso que disponga para su beneficio personal o familiar”, dijo.
El pasado 6 de noviembre, la secretaria de Turismo del Gobierno de la Ciudad de México, Paola Félix Díaz, renunció a su cargo tras darse a conocer que viajó en un avión privado a la boda de Santiago Nieto y Carla Humphrey en Guatemala.
Al respecto, el presidente López Obrador y la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, aseguraron que en el gobierno de la 4T ningún funcionario puede usar aviones privados.
“Eso se acabó en el gobierno de la ciudad, nada de usar aviones privados, aquí somos ciudadanos gobernando ciudadanos y nuestro objetivo, y por eso llegamos al gobierno, es que como ciudadanos actuemos como tal”, expresó.