En una operación fast track el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó la expropiación y ocupación inmediata de más de un millón de metros cuadrados de tierra ubicados en Tulum y otros municipios de Quintana Roo para destinarlos a la construcción del Tren Maya, comentó Marcos Aguilar Vega, vocero nacional del Partido Acción Nacional.
Por segunda ocasión la autoridad judicial ordenó suspender definitivamente el Tren Maya, porque está comprobado que el “proyecto insignia” de este sexenio no cuenta con los permisos de impacto ambiental que se requiere para cualquier obra de esta naturaleza, según la normatividad establecida.
Sin embargo, por encima del ordenamiento judicial, el Presidente decidió inmediatamente publicar este decreto, que vulnera el equilibrio ecológico de la zona y, resta autoridad y autonomía al Poder Judicial.
Para Acción Nacional, el decreto tiene una clara intención de cumplir un capricho político a cualquier costo, y vulnerando cualquier poder ajeno a él.
La decisión presidencial nos confirma que AMLO pretende impulsar un sistema político antidemocrático, autoritario, que se impone sin consenso y sobre la ley finalizó, Aguilar Vega.