Margarita Ortega, mamá de Camila, la pequeña que murió a manos de sus plagiarios en Taxco, Guerrero, lamentó que confió en las personas equivocadas al ceder que su hija fuera a la casa de sus raptores, por lo que rechazó tener la culpa por el fallecimiento de la menor.
“No es mi culpa, yo siempre he cuidado a mi hija… confíe en las personas equivocadas porque me dieron otra cara”, aseguró.
Lo anterior luego de que Doroteo Vázquez, secretario de Seguridad de Taxco, declarara que en la muerte de la menor “hubo una responsabilidad maternal y hay una omisión, porque si yo como padre tengo un hijo debo vigilarlo, orientarlo y guiarlo”. Por sus dichos, el funcionario ya ofreció una disculpa pública.
La madre señaló que no era la primera vez que iba a jugar con la hija de Ana Rosa Díaz Aguilar y que Camila las quería mucho.