En diciembre de 2020, surgió la empresa latinoamericana Merama, que en pocos meses logró convertirse en un unicornio al valorarse en más de 1,200 millones de dólares, fundada por el estadounidense Sujay Tyle y el mexicano Felipe Delgado. También tiene como socios, al francés Olivier Scialom, el brasileño Renato Andrade, y los chilenos Domingo Cruzat y Manuel José León. Aunque su base corporativa está en México y Brasil, y además tienen presencia en Argentina, Chile, Colombia, Perú y Estados Unidos.
Merama se presenta como una aceleradora de marcas de e-commerce en América Latina, enfocándose principalmente en las plataformas de ventas como Amazon, de Jeff Bezos, y Mercado Libre, de Marcos Galperin. Su modelo de negocio supuestamente consiste en adquirir participaciones mayoritarias en empresas de ventas online con alto potencial para expandirlas, pero según ex empleados y propietarios de compañías mexicanas que planeaban aliarse con ellos, esto no siempre ocurre y las empresas resultan perjudicadas al perder su valor.
De acuerdo con las denuncias de ex socios comerciales mexicanos y ex colaboradores, el modus operandi de Merama consiste en adquirir parte de estas empresas para extraer su conocimiento y luego dejarlas morir si no cumplen con las expectativas. Muchos afirman que Merama no cumple con su promesa de acelerar el crecimiento de las empresas que adquiere, sino que más bien las arrastra, careciendo del conocimiento y contactos necesarios para expandir un negocio.
Los inversionistas de Merama también se sienten defraudados debido a que la empresa no ha alcanzado los objetivos de negocio prometidos. A pesar de levantar grandes sumas de dinero en rondas de inversión (160 millones en serie A y luego 225 millones en serie B), la compañía no ha cumplido con sus expectativas financieras y su realidad dista mucho de lo que declara públicamente. Esta firma en su momento fue apoyada por fondos como Valor Capital, Monashees Capital, Balderton Capital, Ualá, Rappi, Loggi y Madeira Madeira. Así como Softbank y Advent International.
Por ejemplo, en junio de 2023, Reuters informó que Merama decidió despedir al 10% de su plantilla laboral, contradiciendo sus declaraciones sobre facturación. Aunque la compañía lo llamó un “reajuste estratégico”, muchos ven esto como una señal de problemas internos. Incluso, ex empleados señalan que aún continúan los recortes.
Merama sigue un patrón similar a Thrasio, líder en la industria de agregadores, que se declaró en quiebra en marzo de 2024 después de levantar grandes sumas de dinero y enfrentar despidos masivos. Esto genera dudas sobre la capacidad de Merama para cumplir sus promesas de crecimiento empresarial mediante tecnología, estrategias de marketing y más capital operativo.