Diversas empresas, no preponderantes del sector de telecomunicaciones, acusaron en el Senado de la República favoritismo en la adjudicación de licitaciones en este rubro y exigieron al gobierno que haya “piso parejo” para todos.
Sostuvieron que se han otorgado contratos a empresas que tienen serias irregularidades en el pasado, pero siguen siendo favorecidas por la presente administración federal a la hora de los concursos.
En un documento que será remitido a la comisión de Comunicaciones y Transportes del Senado, recordaron que el presidente Andrés Manuel López Obrador prometió que se revisarían los contratos adjudicados en pasados gobiernos y que no habría empresarios favoritos del sexenio, lo que no se ha cumplido.
Señalaron como graves los casos de aquellas empresas que llevarían Internet a todo el país, a través del programa México conectado y entre las que se encuentran Telecomunicaciones de México, Cablevision, Axtel, Alestra y Megacable.
Según el diagnóstico de la actual administración, de 94 contratos convenidos para ese objetivo, se dejó de prestar el servicio en 47 por ciento de los 101 mil sitios públicos que recibían Internet.
Sin embargo, durante este gobierno de Morena se han seguido adjudicando contratos a estas empresas, que como en el caso de Axtel, ha recibido 70 contratos en lo que va de 2019, es decir 4 más de los que logró el año pasado.
Recordaron que esta empresa incluso fue señalada en otros procesos, de recibir contratos a modo, como pasó en 2016 en la Cámara de Diputados, cuando Teléfonos de México acusó que se le otorgó una adjudicación directa, pese al sobreprecio para prestación de servicios en el palacio legislativo de San Lázaro.
Los quejosos acusaron que la Auditoría Superior de la Federación ha denunciado una serie de irregularidades en licitaciones “a modo” para que algunas compañías brinden servicios de telefonía e Internet, aunque ofrezcan un sobrecosto de hasta 40.5 por ciento superior a la propuesta de otras empresas como las de Carlos Slim.
Por ello, los denunciantes consideraron necesario revisar los procesos de licitación y adjudicación para que empresas que han trabajado de manera transparente y con lealtad a México, también puedan ser beneficiarias de los contratos en materia de telecomunicaciones.