Tras los problemas mundiales generados por la guerra entre Ucrania y Rusia, más la suspensión de gas ruso a Europa, se esperaba que afectara a países en Latinoamérica como México, pero no fue así.
Petróleos Mexicanos (Pemex), ha informado que pudo revertir la tendencia a la baja en la plataforma de producción, ya que no se sumergió en niveles de pérdida de 1 millón 111 mil barriles por día.
Esto se debe a que lograron ajustarse a las necesidades de México y cambiaron su estrategia hacia el desarrollo de pozos nuevos, además de conseguir una mayor producción por la incorporación de nuevos desarrollos.
Gracias a que el Gobierno decidió seguir exportando alrededor de un millón de barriles de crudo al día para aprovechar el alza de los precios del petróleo tras el conflicto armado y la imposibilidad de las refinerías locales para aumentar su procesamiento y producción de petrolíferos.
“Después de muchos años de declinación de la producción, hemos establecido una serie de estrategias, de tareas, que han detenido esa declinación. (…) a partir del 2019, la producción se estabilizó y por tercer año consecutivo se ha logrado un incremento en la producción de petróleo. algo que no se había visto desde hace 20 años”, informó Octavio Romero Oropeza, director general de Pemex,
Los altos precios de los derivados del petróleo por asuntos geopolíticos, tales como el alza del precio del petróleo por el aumento de la demanda por mayor movilidad en Asia.
La invasión de Rusia a Ucrania que provocó que el mercado europeo impusiera sanciones a las compras de productos rusos, se llegó a ingresos por ventas de gasolinas de 70,227 millones de pesos, valor superior en 18% al del año anterior.
Esto sumado al cambio de estrategia de la petrolera mexicana hizo que el golpe internacional no fuera tan devastador como se tendía previsto.