Jesús Evodio Velázquez Aguirre nació el 2 de febrero de 1978 en Acapulco, Guerrero. Logró licenciarse en Economía después de dificultosos años, que lo llevaron de la Facultad de Economía de la UNAM a la Unidad Académica de Ciencias Sociales de la Autónoma de Guerrero. Esto después de haber cursado ocho semestres y haber logrado su sustento gracias a una asesoría en el Congreso de la Unión. Tuvo que regresar, por asuntos familiares, a salir adelante en la misma tierra que lo vio nacer, tierra que ama y que ahora tiene la oportunidad de gobernar.
Anteriormente diputado local, Diputado Federal, Secretario General del PRD en Guerrero y hoy Presidente Municipal de Acapulco, Evodio se ha hecho de una experimentada carrera política con mirada fija y objetivos claros. No titubea, conoce las corrientes del mar que es la política y se desplaza con naturalidad sobre ellas, está consciente de lo que implica estar al mando de una barca que sortea uno de los climas más intempestivos del país, el de Acapulco, y lo hace con disposición y actitud envidiables. Esto nos lo platicó en la entrevista exclusiva que en CM nos concedió…
CENTRAL MUNICIPAL (CM)› Hace unos años hablar de Acapulco era hablar de turismo, chilangos y vacaciones: sol, arena y mar. Hoy, al hablar de Acapulco, inevitablemente se habla de violencia e inseguridad. En CM creemos que Acapulco es mucho más que eso. ¿Qué puede decirnos su Presidente Municipal? ¿Cómo ves Acapulco hoy en día?
EVODIO VELAZQUEZ (EV)› Acapulco es una ciudad, el centro de una zona metropolitana. Una ciudad con un espacio estratégico en el mapa de la República Mexicana, donde tu conectividad es importante: hacia el centro, hacia la costa chica, hacia la costa grande. Acapulco, es mucho más que una nota de violencia o de inseguridad, que ha generado una percepción difícil para una ciudad como ésta. Acapulco es una ciudad con un millón de habitantes; una ciudad que ha venido creciendo enormemente y que es parte de la estabilidad económica de un estado con pobreza extrema, con una gran condición marginal.
Sin lugar a dudas, Acapulco, de los últimos diez años a la fecha, ha pasado tiempos complicados en materia de percepción e imagen. No obstante, lo que significa Acapulco es mucho más que el daño que le ha hecho la ruta mediática. Tal vez es muy fácil hablar mal de Acapulco, no dejando de lado que estamos en un problema que diariamente asimilamos y trabajamos para poder cambiar. Acapulco es más que eso: es una ciudad llena de cultura, llena de historia, de atracciones y de magia. Simplemente no puedes mirar a Acapulco como otro destino turístico; a Acapulco lo amas, Acapulco no sólo te gusta, lo sientes, viene en tu entraña porque tenemos muchas historias que contar al paso de la vida de muchas generaciones: las tuyas, las mías, las de nuestros papás y nuestros abuelos.
«Yo puedo terminar en tres o seis años pero mi legado dejará una ruta clara y visionaria para mejorar Acapulco.»
Acapulco está en una condición de levantar la mano. Estamos a punto de cumplir 500 años del descubrimiento de la bahía. Tenemos un emblema. Somos una marca registrada en el mundo entero. Somos la ciudad más importante y el destino turístico de México que más logros ha tenido a nivel mundial.
CM› Evodio, situados en el contexto de que hay mucho que hacer por Acapulco, tú eres uno de los primeros alcaldes que puede pensar a seis años. ¿Tu proyecto integral de gobierno contempla este plazo?
EV› Por supuesto. Hoy Acapulco lo debes de pensar con planeación. Este gobierno ha echado a andar temas innovadores. En primera instancia, hemos decidido construir el nuevo Acapulco, la nueva realidad, la nueva visión y la nueva condición de la ciudad y del destino turístico que representa. Lo plasmo en mi slogan de gobierno: «Construyendo el nuevo Acapulco». Lo creo.
Entonces, si lo crees, hay que planear. Y hay que planear a corto, mediano y largo plazo. Para ello dimos vida al Instituto Municipal de Planeación, y éste planea el Acapulco más allá del alcalde que pueda ser Evodio. Yo puedo terminar en tres o en seis años, pero mi legado dejará una ruta clara y visionaria para mejorar Acapulco en movilidad, sustentabilidad, en el desarrollo de la economía, de la vivienda y en competitividad. Sobre todo en el tema turístico. Eso es lo que yo aspiro a dejar en mi gestión.
CM› ¿Y en seguridad?
EV› Yo veo a la ciudad hoy, con su problema de violencia e inseguridad que se ha venido agravando ante la anarquía que ha existido en Acapulco durante varios años, incluso —diría yo— varias décadas. La anarquía que va desde la forma de crecer en una ciudad sin una planeación específica, en una ciudad que ha crecido adoptando culturas, un mosaico de ciudadanos guerrerenses y de otras regiones. Desde los hermanos indígenas hasta los afromexicanos que están en la costa chica, o hacia muchos que ven Acapulco como un lugar donde pueden habitar, donde pueden generar riqueza y porvenir. Entonces, se genera una multicultura y se empieza a dañar el tejido de Acapulco por la falta de atención de los exgobiernos en materia social.
Aquí entra uno de los ejes que yo planteo: el de la prevención social, de la violencia y la delincuencia. La búsqueda de mermar las causas que generan estos dos grandes males que le están pegando duramente a Acapulco. ¿Cuáles son las causas? Abatir la pobreza y la marginación, generar alfabetos y no analfabetas, hacer que la salud sea de mejor calidad y recuperar tu entorno de vida, tu forma de desarrollo. Ése es uno de los ejes. El otro abarca la parte de la contención. Esto es muy importante. Nuestra coordinación con las fuerzas militares, con las fuerzas policiacas, con la ruta de las tecnologías. En los próximos años Acapulco tendrá un sistema de seguridad C5, que será un planteamiento importante en materia de tecnologías. Hoy le estamos apostando al tema del equipamiento, de la capacitación, de la certificación, de los elementos de seguridad pública que permitan una mejor condición. Desarrollando nuevos esquemas operativos, pero también nueva presencia en cuerpo policiaco.
De ocho meses a la fecha hemos hecho innovaciones en esta parte: presentamos un proyecto que denominamos «Escudo Acapulco». Lo vertimos en la ruta de la contención y la profesionalización, capacitación y certificación del cuerpo policiaco, así como a la parte social, la parte de la reestructuración y fortalecimiento de la sociedad.
CM› Entiendo que esta última cuestión se lleva a nivel local. ¿No friccionaría con la reforma federal de seguridad que propone un Mando Único?
EV› No, al contrario. Esta política pública es un complemento del planteamiento que está haciendo el Gobierno de la República. Hoy, estamos de acuerdo, es necesaria una estrategia; ésta debe tener un mando único que coordine fuerzas estatales, federales y municipales, no adoptar un término de duplicidad de acciones; más bien que busquemos que sea eficiente la labor del policía calificado y certificado de manera homologada para generar mayor confianza, pero que podamos respetar también lo que hasta este momento rige el 115º constitucional: las policías están a cargo de los municipios. Hoy tenemos que ser flexibles y buscar que vayamos compartiendo este mando.
«Es una gran opción para el PRD en el país caminar con el PAN en alianza y, lógicamente, reproducirla en Guerrero.»
CM› No se puede negar que eres una de las principales figuras de oposición en Guerrero. Para muchos, incluso, vas en la vía de precandidato a la gubernatura. ¿Cómo está tu partido tras todos los acontecimientos lamentables que han acaecido en tu estado?
EV› Los partidos son entes que van más allá de las personas y las figuras. Son ideología, planteamientos de política pública y formas de gobernar y debatir. Hoy mi partido está retomando un rumbo que ha sido complicado de recobrar. El PRD tiene la condición de ser un partido maduro que, a más de 20 años de existir, ha demostrado que está más allá de cualquier interés personal y que hoy está sufriendo cambios importantes.
Ha tenido que generar rutas extraordinarias, decisiones debatibles, pero necesarias en tiempos modernos de democracia e inclusión. Hay que ver lo que pasa en Europa, Latinoamérica, Cuba. Creo que hoy lo que debes hacer es abrir tu espectro y advertir que la izquierda no está tan lejos de la derecha, más bien, lo que debe unificar es lo que se debe hacer por el bien de la gente, por el desarrollo de una sociedad que a gritos pide una resolución de los grandes problemas que tiene el país. Para ello, ahí están muchas alternativas, incluyendo la parte de los ciudadanos que decidan competir. No obstante, esto tiene sus complejidades porque las plataformas establecidas son los partidos políticos.
CM› ¿El PRD sigue siendo una opción real?
EV› El PRD sigue siendo una opción para Guerrero y para el país. Hablando de mi estado, hoy el PRD es un partido muy fuerte, es el partido de oposición, que ha sufrido alzas y bajas. Tú puedes ir a ver cómo nos fue en el 2006 cuando fuimos gobierno, cómo se ganó todo. Pero también puedes ver el 2009, cómo se perdió todo. Y cómo nos fue en el 2012, cuando conservamos el gobierno. Creo que hoy el perredismo de Guerrero está en la condición de entender que el PRD en Guerrero tiene una base ideológica, ciudadana y de entraña en el movimiento social.
En Acapulco, con todo lo que tuvimos en contra, ganó Evodio Velázquez la Presidencia Municipal, pero no se ganó más; los distritos federales, los locales y la gubernatura las ganó otro partido.
CM› Si consideramos las elecciones de 2016 en que la coalición de oposiciones se llevó la gran tajada del pastel, ¿verías viable una alianza entre el PRD y el PAN?
EV› Yo creo que es una alternativa. Es una gran opción para el PRD en el país caminar con el PAN en alianza y, lógicamente, reproducirla en Guerrero. Pero también es una opción real aprender de los errores de la izquierda y poder hacer un gran frente político de izquierda alternativo. Puede ser el sueño de muchos que pensamos que, en México, se necesita un cambio de fondo. Un cambio en el hacer y no en el decir. Para ello tenemos que ir viendo cómo se dan los acontecimientos.
Yo creo que, electoralmente, el país se equilibra, las tres principales fuerzas del país toman lugares territoriales que son parte importante de la decisión final que tendrá que tomarse en 2017. Guerrero será estratégico y tendremos que ver hacia dónde jala la carreta. Si jala hacia la izquierda o jala en un planteamiento híbrido, entendiendo lo que está pasando en el mundo entero.
CM› Al ser tú una figura de oposición, ¿cómo trabajas con el Gobierno de Guerrero y con el Gobierno Federal?
EV› Yo soy un gobernante institucional. Nunca dejaré que otros digan cómo debe gobernar Evodio Velázquez desde lo que hoy representa. Construir en esta realidad que vive el país, de diferentes ideologías y partidos, es muy complejo. Porque el Gobierno Federal o el estatal, cuando no es de tu partido, a veces no quiere ayudar. Lo que he intentado es priorizar la necesidad que tiene Acapulco de que demos resultados. He buscado ponerme de acuerdo con los actores, he manifestado mi respeto y mi interés institucional a construir lo mejor que deba tener hoy Acapulco. En ese sentido hemos trabajado con mucho respeto con el Gobernador del Estado y con el Presidente de la República.
CM› Pediste al Gobierno Federal una suma importante de recurso para trabajar por Acapulco. ¿Fueron accesibles?
EV› Sí. Estamos planteando que el problema que vive Acapulco necesita la solidaridad de todos los que amamos Acapulco y que hoy tenemos una decisión dentro de un gobierno. El Presidente de la República es un hombre que ama Acapulco, como muchos Secretarios de Estado y como muchos ciudadanos. Creo que se puede tocarles la puerta con una base sólida: con un proyecto que plantee lo que quieres hacer. Acapulco tiene problemas graves de infraestructura y la necesidad de convertirse en un destino turístico competitivo a nivel mundial.
Para ello debes de renovarte, de fortalecer esa gran ventaja que has tenido durante años. No solamente el clima, la playa, el sol, el servicio, sino mucho de lo que hoy representamos como destino turístico y como marca registrada. Para ello, lo que hay que hacer es presentar un plan maestro (que es lo que he venido haciendo), y decirle al Gobierno de la República: «esto necesitamos en la parte de los recursos hidráulicos para mejorar el abastecimiento de agua; esto necesitamos para el tema de vivienda; esto para el tema de turismo, reestructuración y nuevas atracciones para Acapulco; esto necesitamos para el tema del desarrollo económico, del desarrollo social, del tema del campo, de la diversificación de un territorio.»
«No me voy a detener para hacer los grandes cambios que necesita Acapulco.»
CM› ¿Platícanos algo en específico de estas necesidades?
EV› Por supuesto. Nuestros problemas son, desde seguridad, que nos obliga a los tres órdenes de gobierno a tomar decisiones conjuntas. Y esa parte está blindada. Lo que hemos hecho es reproducir esta parte de los tres órdenes para hacer otras cosas extraordinarias, como el Acabus. La sustentabilidad pasa por la movilidad de la misma. Hoy contamos ya con un Acabus que entró en funciones desde junio y es un sistema de transporte moderno, efectivo y con infraestructura importante. Estamos analizando temas como ciclovias, el teleférico, u otras formas de mover a la población sin generar el uso del automóvil y contaminar una ciudad que no puede arriesgarse a malos índices de contaminación.
Por otro lado, el tema de la diversificación de Acapulco como detonante estratégico de la economía en el país, aprovechar que hoy Acapulco puede tener el Acapulco rural, para detonar la parte del desarrollo rural y que el municipio sea autoconsumible y, por el otro lado, industrializar Acapulco más allá de la parte del turismo.
El turismo es la industria más importante, pero hay que diversificarnos. Aprovechar nuestra parte estratégica hacia el centro del país, donde hay 45 millones de habitantes. Mira, la situación económica del país es de una crisis que ha disparado el dólar sobre el peso y la caída del precio de barril de petróleo crudo en el mercado mundial. Si tu presupuesto de egresos de la Federación lo calculas por el precio del petróleo en este momento, y se cayó el precio del petróleo, necesitas encontrar nuevas formas y divisas. Hoy, en México, la alternativa se llama turismo. Y, ante la creciente materia turística de México en el mundo, Acapulco se vuelve una opción real.
CM› Eres un político experimentado y eres economista, ¿qué pasa si por esta situación que mencionas en la que está el país no se te concediera la participación federal para solucionar cada problema?, ¿tienes algún plan alterno?
EV› Claro. Un gobernante no puede ni debe permitir confiarse ante ninguna circunstancia. Tenemos que aprender a tocar todas las puertas. Y hoy tenemos la alternativa de los nuevos esquemas de participación privada con los gobiernos, con las APPs [Asociaciones Publico-Privadas], y todas las figuras jurídicas de inversión pública. La alternativa es, también, la gestión de tus pocos recursos. No nos vamos a detener. No me voy a detener para hacer los grandes cambios que necesita Acapulco. Y, para ello, estamos tocando todas las puertas.
CM› Pasemos ahora, Evodio, a la recta final de la entrevista para conocerte como persona. Algunos de tus gustos y costumbres. ¿Qué zona crees que es mejor para comer en Acapulco: Barra Vieja, Pichilingue, La Costera o el Centro?
EV› Híjole, todas.
CM› ¿Tienes algún restaurante predilecto?
EV› No me pongas en ese dilema que entonces se me sienten todos los demás. Desde un buen pescado a la talla en Barra Vieja, hasta un buen ceviche en Pie de la Cuesta, viendo la puesta de sol, hasta unos camarones en la Condesa. Hay para todos y de todos los precios.
CM› ¿El mejor lugar para ver una puesta de sol?
EV› Pie de la Cuesta.
CM› ¿Mar o tierra?
EV› Mar.
CM› Marihuana, ¿sí o no?
EV› ¿Consumirla?
CM› O legalizarla.
EV› Consumirla, no, no la he consumido. Legalizarla, creo que es una alternativa en el país. Es una opción para atender los nuevos retos que se tienen en el tema de la droga en México. Sería importante la legalización de la marihuana y explorar sus usos medicinales. Otro es el tema de la amapola, que terminaría con los sembradíos ilegales que, en el caso de mi estado, Guerrero, sería una gran oportunidad para hacer una gran industria ante la ruta medicinal.
CM› ¿Hora del despertador?
EV› A veces a las 6 o 7 de la mañana. Tienes que ir a dejar a los chavos.
CM› Cantidad de visitas que haces a la Ciudad de México al mes.
EV› ¿Al mes? Vendré unas cinco veces.