El huracán Erick se formó este miércoles en el océano Pacífico y se espera que deje fuertes lluvias, vientos intensos, marejadas ciclónicas y posibles deslaves en la costa sur de México, dijo el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
En los estados de Oaxaca y Guerrero podrían caer hasta 51 centímetros (20 pulgadas) de lluvia, y en Chiapas, Michoacán, Colima y Jalisco se esperan cantidades menores, señaló el centro con sede en Miami en su aviso.
“Se espera que traiga condiciones de huracán y riesgos mortales, inundaciones repentinas en partes del sur de México más tarde esta noche y jueves”, advirtió la dependencia estadounidense.
Cabe destacar que se espera que sea el primer sistema ciclónico de la temporada 2025 con impacto directo en el territorio nacional, según confirmó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
Las autoridades meteorológicas y de Protección Civil ya habían advertido con antelación sobre la peligrosidad de este fenómeno, cuyo desarrollo fue monitoreado desde su formación el martes 17 de junio.
La Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) también advirtió sobre la evolución de la tormenta tropical ‘Erick’ a un huracán, al cual se le dio la categoría 1 en la escala Saffir-Simpson.
La Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) desplegó desde el martes 17 una misión de enlace en colaboración con autoridades estatales y municipales de Chiapas, Oaxaca y Guerrero, a fin de coordinar acciones preventivas y de atención inmediata a la población afectada.
Hasta el momento, se mantienen activos albergues temporales, brigadas de rescate, y unidades móviles de atención médica y logística.
Con la entrada de Erick, suman cinco los sistemas tropicales formados en el océano Pacífico durante la temporada de 2025. Si bien no es el primero en desarrollarse, sí es el primero en impactar directamente el territorio nacional, lo que marca un punto crítico en una temporada que ha sido catalogada como más activa de lo habitual.
El SMN advirtió a inicios de la temporada que la etapa más intensa está próxima, con picos de actividad ciclónica esperados entre agosto y septiembre.