Más de un centenar de habitantes de Ocuilan, Estado de México, irrumpieron en la presidencia municipal para exigir la regularización del suministro de agua potable, el cual ha sido interrumpido desde hace semanas.
De manera pacífica, los vecinos reclamaron que la falta de agua afecta sus necesidades más básicas, situación que se agravó cuando la bomba de un pozo local se quemó, dejándolos sin acceso al vital líquido.
La movilización ocurrió justo cuando las autoridades locales reanudaban actividades tras el puente por el Día de Muertos, por lo que el personal administrativo fue retirado temporalmente mientras se busca una solución a la demanda de los pobladores.