El Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) concedió un amparo liso y llano a favor de Laura Morán Servín, acusada por el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, de la muerte de su hermano Federico, ocurrida en 2015.
Los ministros de la Corte decidieron juzgar con perspectiva de género, para establecer que, aunque Laura Morán mantenía una relación de concubinato con Federico, no era implícito que fuera responsable de los cuidados de su pareja.
Sin embargo, se estableció que, por su condición de persona adulta mayor, con 88 años en el momento de la muerte de Federico Gertz, buscó la asistencia de médicos, enfermeros y especialistas para los cuidados de él.
El ministro Juan Luis Alcántara Carrancá planteó que, la imputada, debe recibir una reparación del daño y considerarla como víctima al sufrir una imputación injustificada por parte del Estado, que la llevó enfrentar una orden de aprehensión, por la se mantuvo como prófuga.
Tras la votación, uno de los efectos es cancelar la orden de aprehensión en su contra.
Luego de la resolución de este asunto, el Pleno de Corte procedió a revisar el caso del amparo promovido por la hija de Laura Morán, Alejandra Cuevas Morán, quien permanece detenida en Santa Martha Acatitla, desde octubre de 2020.