El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció una pausa en la relación entre el Gobierno de México y las embajadas de Estados Unidos y Canadá, en respuesta a las críticas que lanzaron contra la reforma al Poder Judicial que se discute en el Congreso mexicano.
Durante su conferencia matutina, afirmó que la relación con el Embajador de Estados Unidos “es buena, pero está en pausa” desde que este se pronunció sobre la reforma judicial. Pausar significa que vamos a darnos nuestro tiempo”.
Enfatizó que, aunque no se les pedirá a los embajadores que abandonen el país, sí se les debe “leer la Constitución, que es como leerle la cartilla”.
López Obrador hizo hincapié en que, como Presidente, debe ajustarse a los principios constitucionales de no intervención y autodeterminación de los pueblos. “Cómo le vamos a permitir que él opine que está mal lo que estamos haciendo”, cuestionó.
Incluso, calificó como de “pena ajena” la postura del Gobierno canadiense, señalando que ambos países se pronunciaron “al mismo tiempo”.
El presidente aclaró que la pausa es con las embajadas y no afecta la relación bilateral con estos países. “Ojalá haya de parte de ellos una ratificación de que van a ser respetuosos de la independencia de México, de la soberanía del País”.
Respecto a lo que podría poner fin a esta pausa, el Mandatario mencionó que espera “una aclaración por parte de ellos”, sugiriendo que podrían expresar que “el asunto de la Constitución de nuestro Gobierno es la aplicación de nuestra democracia” y que respetarán las decisiones tomadas por el “Gobierno legal y legítimamente constituido”.