El rancho Izaguirre, en Teuchitlán, Jalisco, era un centro de adiestramiento para el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), donde se torturaba y ejecutaba a quienes se negaban a recibir el entrenamiento para incorporarse a la organización criminal, confirmó el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar Garcia Harfuch.
Esta información, dijo, se obtuvo por el testimonio de José Gregorio Lastra Armida, alias “El Lastra”, quien era el principal reclutador para ese espacio y que fue detenido hace unos días por autoridades federales.
Al dar los detalles de la aprehensión el 20 de marzo de este presunto líder criminal en la alcaldía Cuajimalpa, de la Ciudad de México, donde trató de ocultarse ante las indagatorias abiertas tras el hallazgo del rancho, el funcionario federal señaló que se ha identificado la estructura criminal y los principales líderes operativos de ese cártel para los reclutamientos.
“El Lastra” “es uno de los principales colaboradores de Gonzalo N, alías ‘El Sapo’”, líder del CJNG en diversos puntos del occidente del país. “Era el responsable del reclutamiento, tenía a su cargo el rancho Izaguirre. Se le vincula con el reclutamiento de mayo de 2024 a inicios de marzo de 2025”, señaló Garcia Harfuch.
Explicó que el cártel creó en redes sociales y otras plataformas páginas para ofrecer oportunidades laborales falsas, mediante engaños, ligadas a grupos de seguridad privada y con un salario de 4 a 12 mil pesos semanales.
“Se les citaba en distintas terminales de autobuses y se les trasladaba al rancho, se les daba acondicionamiento físico y eran uniformados con botas y ropa táctica, se les retiraban celulares”. Por un mes se prolongaba el entrenamiento y se les mantenía incomunicados durante ese periodo.