Morena se ha sumido en una lógica burocrática y de lucha de facciones, por lo que es momento de dar un golpe en la mesa y volver a acercar el partido a la militancia y recorrer de nuevo las calles y las colonias, asegura Gibrán Ramírez Reyes.
El aspirante a la dirigencia nacional de Morena subraya que el partido se alejó de la militancia y se acercó a las elites burocratizadas, incluso en la Ciudad de México, “todo se volvió lucha entre facciones”.
“Soy profesor de la UNAM que ha militado la mitad de su vida en el movimiento de AMLO y veo con mucha inquietud la decadencia que tiene en poco tiempo el aparato partidista, sumido en una lógica burocrática y lucha de facciones”.
Para el Doctor en Ciencias Políticas y Sociales, con mención honorífica de la UNAM, hay un reclamo entre las bases por el abandono del territorio por parte del partido.
“Hemos estado inmersos en una lucha de facciones que no hemos podido superar. Hay una gran demanda por tener un liderazgo fuera de las burocracias. Por eso recorro el país, para escuchar a la gente. Creo que por ello mi candidatura ha sido bien acogida”.
Subraya tajante: “Sí soy militante, y me importa que nuestro partido se componga, es la última llamada para hacerlo bien”.
Ello, dijo, porque si se mantiene la lógica de facciones y cuotas en estas elecciones y en 2021, entonces el partido “ya se echó a perder y muy difícilmente rescataremos un mínimo de institucionalidad”, apuntó.
Ramírez Reyes, quien solicitó licencia como secretario General de la Conferencia Interamericana de Seguridad Social, recordó en ese sentido que otros contendientes como Mario Delgado o Porfirio Muñoz Ledo no han hecho lo mismo.
En su opinión, no se han tomado la contienda seriamente, “como si disputar la dirigencia fuera una cosa que se pudiera hacer los fines de semana y en los tiempos libres”.
Consideró también que el principal descontento el principal causante del declive de la pérdida de 15 puntos porcentuales en la intención de voto estos dos años es el gobierno municipal, pues mientras el presidente se mantiene con grandes niveles de aceptación, hay la impresión de que el partido se ha vuelto omiso.
Y el nivel municipal es lo más cercano a la gente y si no hay algo que distinga a Morena, que sigan poniendo a sus familiares en puestos y el partido no diga nada, vendrá el desencanto, en muchos casos ya vino el desencanto”.
Por ello, una de las propuestas urgentes del candidato es la creación de un Observatorio de Gobiernos
Estatales y Locales; el partido debe tener cercana vigilancia de los gobernantes que alcanzaron el
poder bajo su sello, porque eso da cuenta de la confianza social a un proyecto. Que los que se
alejen sean, por lo menos, señalados, indicó.
El Maestro en Ciencia Política por El Colegio de México consideró que el ataque y la calumnia que ha sufrido es signo de que va creciendo su proyecto, el cual recoge también la demanda de la militancia de correr “a chapulines y oportunistas que llegaron bajo la legitimidad de AMLO a gobernar con muy malos modos“.