Las grandes mujeres de nuestro país, como nuestra jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum Pardo y ahora la primera mujer mexicana en llegar al espacio Katya Echazarreta, le brindan a las niñas de todo México un mensaje claro: ¡Es posible cumplir todos tus sueños!
“Que nunca nadie les diga que no pueden ser lo que ustedes se propongan; que nadie les detenga sus sueños, las mujeres podemos llegar adonde queramos llegar”, fueron algunas de las palabras de la Doctora Sheinbaum Pardo al entregar las llaves de la ciudad de México a la astronauta de 27 años tripulante de la nave New Shepard, en la misión NS-21 de Blue Origin.
Nacida en Guadalajara, inició sus estudios de Electricidad en San Diego City Collage para trasladarse tres años después a la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) donde se gradúa con el título de Ingeniera Eléctrica (Electrical Engineering).
Durante su estancia en la UCLA obtiene una pasantía en el Laboratorio de Propulsión a Reacción de la NASA donde es finalmente contratada como ingeniera en Electricidad de tiempo completo, trabajando en cinco misiones de la NASA.
Actualmente realiza estudios de Ingeniería Eléctrica e Informática en la prestigiada Universidad John Hopkins.
Entre el público asistente al evento estaban las niñas de la Ciudad de México que son beneficiarias de la Beca Leona Vicario, una mujer que luchó por la independencia de México, la primera periodista mexicana que decidió abandonarlo todo para luchar por la Independencia y por su patria.
Por su parte Katya Echazarreta reveló que a los 7 años, al llegar a Estados Unidos, sin hablar inglés, tuvo un sueño: y por primera vez dijo las palabras que le cambiarían la vida por completo: ¡yo voy a ir al espacio, y yo voy a estar en la NASA!; y fue así como la hija de mexicanos migrantes logró destacar en Estados Unidos por sus logros en el área de la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
Entre el público también estaban Yara Peimbert, Ana Paula Jiménez y Ana Illanes Martínez de la Vega, reconocidas con medallas de matemáticas en diversas Olimpiadas.
Se trata de una ingeniera y persona excepcional, como lo son las mujeres mexicanas y lo logrado por la joven originaria de Jalisco, es sin duda un orgullo para todas y todos nosotros.
Es tiempo de reflexionar sobre la profunda impronta de las mujeres, sobre el quehacer científico y tecnológico del país, que se ha llevado a cabo, casi siempre, en condiciones históricas de desigualdad. Las mujeres han roto lo que se conoce como “techo de cristal”.
Han pasado más de 35 años desde que el doctor Rodolfo Nery Vela, primer astronauta mexicano, despegó del Centro Kennedy a bordo del Trasbordador Espacial Atlantis; y ahora como parte de la misión Blue Origin , vuelve a enaltecerse el nombre de México con la ingeniera Echazarreta.
Lo suyo es un ejemplo profundo de determinación, de entrega que permite revertir los legados sociales y culturales de desigualdad, y violencia sistémica que viven las mujeres. Katya ha sabido abrirse camino en el campo científico y tecnológico “destruyendo a su paso marañas de prejuicios y estructuras de poder anquilosados, en beneficio de las generaciones presentes y por venir”
LA MEJOR POSICIONADA. Por cierto, en la carrera rumbo a las elecciones de 2024 la jefa de Gobierno resulta ser la mejor posicionada con el 37% revela una reciente encuesta nacional sobre el conocimiento y la opinión de los aspirantes de Morena elaborada por _Enkoll_ y publicada el 1 de agosto.
Además, según la encuesta, el 66% de los entrevistados considera que México está listo para tener la primera mujer presidenta.
Dos mujeres destacadas, con aplomo, inteligencia y lucidez ¡Enhorabuena a ambas y a todas las mujeres mexicanas que desean luchar por un futuro promisorio y una realidad distinta.