Las iniciativas enviadas por la Jefa de Gobierno al Congreso de la Ciudad, así como la decisión de postergar la transición, son un avasallamiento y una embestida a los gobiernos de las alcaldías, al restar facultades y hacer a un lado a los nuevos titulares en la toma de decisiones en sus respectivas demarcaciones territoriales.
Así lo manifestó Mauricio Tabe, alcalde electo en Miguel Hidalgo, durante la conferencia de prensa organizada por la UNA CDMX, luego de señalar que resultan preocupantes las señales que envía el Gobierno de la Ciudad al dejar fuera a los nuevos gobernantes en temas temas sensibles para la ciudadanía como son obras y desarrollo urbano, gestión del espacio público y presupuesto participativo.
“Se han presentado en el último mes una serie de decisiones que ha tomado el Gobierno de la Ciudad, claramente desdeñando a los gobiernos de las alcaldías, porque cuando tendimos la mano para decir ‘queremos diálogo político’, no era para sentarnos a tomar una foto, sino para trabajar en conjunto por mejorar las cosas en la Ciudad”.
En ese sentido, Tabe llamó al Gobierno local a generar esquemas de cooperación y de trabajo en equipo para resolver los problemas que enfrenta la ciudad y no hacer a un lado a las alcaldías por consideraciones político-electorales.
“Estamos a tiempo de reconsiderar si ésta es la tónica de las relaciones con los gobiernos de las alcaldías”.
Subrayó que la postergación del proceso de transición como las modificaciones a la Ley de Participación Ciudadana, con las que se busca otorgar facultades discrecionales a los actuales gobernantes, son señales de desdén.
Este tipo de resoluciones, dijo Tabe, parecen más un ‘salvavidas’ diseñado para que los alcaldes salientes cuenten con el tiempo y los recursos para arreglar sus cuentas y limpiar ‘el tiradero’ antes de entregarlo a los nuevos titulares.
Refirió que otro tema que levanta suspicacias es la nueva Ley de Publicidad Exterior, donde se retira la facultad de verificación a las alcaldías y se les excluye del uso de espacios de publicidad para la difusión de sus acciones de gobierno, como estaba contemplado anteriormente en la norma.
“Estos espacios de publicidad con los que contaban las alcaldías ya no están previstos en la ley, aún y cuando es facultad y responsabilidad de la alcaldía la gestión del espacio público”.
El Gobierno hace a un lado a los gobiernos de las alcaldías y les resta facultades, “pareciera que el ánimo es de centralizar”.
Sumado a esto, explicó el alcalde electo en MH, el Acuerdo para la Reactivación Económica del Gobierno de la CDMX, es otra decisión que ‘patea’ a los alcaldes y los deja fuera de recibir y registrar las manifestaciones de obras y de construcciones en vías primarias y que, casualmente, sólo aplica para las alcaldías gobernadas por la oposición.
“Quedan excluidas las alcaldías que gobierna Morena, expresamente, Iztapalapa, Xochimilco, Tláhuac, Milpa Alta e Iztacalco, nos preguntamos por qué la dedicatoria de ese Acuerdo”.
Subrayó que resultan muy graves toda estas determinaciones que afectan la relaciones del gobierno con las alcaldías y su impacto en la ciudadanía, sin haber sido tomados en cuenta ni para explicarles por qué era necesario centralizar, sobre todo cuando en los próximos meses tendrán que discutir el Presupuesto 2022.
“No quisiéramos ver que ese va a ser el trato a las alcaldías en materia presupuestal”, advirtió.
Finalmente, dijo que el único interés debe estar en resolver juntos los problemas que afectan a la ciudadanía y dejar de seguir abonando a la desconfianza con iniciativas de ley que excluyen a las alcaldías. “Como UNA CDMX lo que queremos es coordinación y capacidad de respuesta con los ciudadanos, que nos nos aten de manos”.