La transformación del Poder Judicial Federal no concluye con las elecciones de 2025. Así lo plantea Antonio Holguín Acosta, vicepresidente de Relaciones Institucionales de Heraldo Media Group, en la edición más reciente de la revista El Mundo del Derecho, donde advierte que este proceso apenas representa una etapa inicial en un rediseño institucional más profundo.
Con el título Nuevo Poder Judicial Federal, la publicación ofrece un análisis sobre los perfiles que asumirán funciones en la Suprema Corte, el Tribunal de Disciplina Judicial y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. En ese contexto, Holguín Acosta recuerda que la intención principal de la reforma apunta a reducir la distancia entre los jueces y la sociedad.
El directivo sostiene que las nuevas autoridades judiciales deben demostrar, a través de sus resoluciones y conductas, que su labor se rige por el respeto a la legalidad y la protección de los derechos. “Un aspecto que debe procurarse y mantenerse durante esta nueva etapa del Poder Judicial es el de la certidumbre jurídica”, señala.
Desde su perspectiva, la entrada en vigor de nuevas normas no puede debilitar el papel del sistema judicial como garante de estabilidad en las relaciones entre las personas. La legitimidad, señala, no debe verse comprometida.
La revista incluye un repaso individual de los ministros que integrarán la Corte: Hugo Aguilar Ortiz, Lenia Batres Guadarrama, Yasmín Esquivel Mossa, Loretta Ortiz Ahlf, María Estela Ríos González, Giovanni Azael Figueroa Mejía, Irving Espinosa Betanzo, Arístides Rodrigo Guerrero García y Sara Irene Herrerías Guerra. Cada perfil viene acompañado de su propuesta para la renovación del sistema de justicia.
Uno de los artículos aborda la controversia que despertó el proceso electoral judicial, en particular por los cuestionamientos a su neutralidad. El análisis plantea la necesidad de revisar los criterios de selección para garantizar independencia en las decisiones.
Holguín Acosta concluye con una reflexión sobre el rumbo que debe seguir esta transformación: “El proceso que hemos vivido para reformar al Poder Judicial Federal es sólo una primera etapa de otras que necesariamente tendrán que venir, en donde no sólo se aborden las cuestiones relativas a la impartición de justicia, sino también respecto de su procuración, de manera particular en las instancias locales, además de lograr que las problemáticas más inmediatas que surjan entre las personas encuentren mecanismos eficaces y rápidos de atención”.