El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo hoy en su conferencia mañanera que con el tiempo la gente de Culiacán, podrá juzgar si fue buena o mala la decisión de evitar la confrontación y preferir proteger la vida de las personas, en vez de la detención de un presunto delincuente.
En su conferencia de prensa matutina, afirmó que tiene la conciencia tranquila y sabe que se actuó de manera correcta, por lo que su gobierno seguirá atendiendo las causas que originan la violencia en lugar de recurrir a las estrategias fallidas de los gobiernos anteriores.
“Nuestros adversarios, los conservadores corruptos, aplicaron una política de confrontación y violencia para garantizar la paz y la tranquilidad y esa política insensata e inhumana produjo más violencia, mucho sufrimiento y masacres”, acusó el mandatario.
Expuso que había decisión de arrasar y lo muestran los datos. Al registrar que fueron más los muertos que los heridos y los detenidos.
López Obrador agregó que desde un principio dijo que se iba a cambiar esa política y no arriesgar la vida de la gente y él avaló la decisión porque “un gobernante, un dirigente puede poner en riesgo su vida, pero no tiene derecho de poner en riesgo la vida de los demás”.
Como se recordará, el jueves pasado después que fue capturado Ovidio Guzmán, hijo de “El Chapo”, grupos delictivos ligados al narcotraficante incendiaron autos y dispararon en las calles de Culiacán, Sinaloa, dejando un saldo de 8 muertos, 16 heridos y 51 reos fugados de la cárcel de Aguaruto.