Para avalar que tanto productos y servicios cumplen con estándares que aseguren su calidad, seguridad y sustentabilidad, resultan clave la normalización, la estandarización, la acreditación, la evaluación de la conformidad y la metrología, enfatizó Andrea Jiménez, gerente de Organismos de Certificación de la Entidad Mexicana de Acreditación (ema), en la Jornada de Normas y Acreditación celebrada en la sede de la CANACINTRA Tijuana, Baja California.
“Mediante dichas actividades englobadas en el Sistema Nacional de Infraestructura de la Calidad, se asegura que tanto productos y servicios en el mercado cumplan con estándares que protegen la salud, la seguridad de los consumidores y el medio ambiente”, refirió.
Más de 8,500 acreditaciones ha otorgado a la fecha este organismo, con alcance en más de 15 países, mientras que, bajo este contexto, la ema evalúa y acredita a laboratorios, organismos de certificación y unidades de inspección que validan el cumplimiento de estos estándares en el ámbito nacional e internacional.
Dirigida a empresarios, industriales y profesionales de sectores regulados, la Jornada de Normas y Acreditación contó también con la presencia de Mónica Vega Aguirre, secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable en Baja California, pues el ejercicio enfatiza en el cumplimiento de normas ambientales por parte de sectores productivos.
Un mecanismo voluntario que promueve entre las empresas el cumplimiento ambiental y la adopción de procesos más eficientes, el Programa Nacional de Auditoría Ambiental (PNAA), fue puesto en relieve, al respecto, por Alberto Rojas Rueda, subprocurador de Prevención Ambiental de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA).
“Las empresas al adoptar el PNAA, además de contribuir a prevenir la contaminación, les genera beneficios como el ahorro de agua y energía, así como la reducción de residuos peligrosos”, explicó el funcionario al subrayar la importancia de la participación activa del sector privado.
La participación incluyó, además, a la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA); a la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), para reforzar la competitividad de las empresas; y a las Unidades de Verificación de Instalaciones Eléctricas (UVIESAC).