Disema Comunicación Gráfica Oaxaca era una empresa dedicada al diseño e impresión de todo tipo de publicidad, pero ante la suspensión de actividades por la propagación del Covid-19, y la falta de ingresos, dio un giro y ahora fabrica caretas fijas y abatibles, así como barreras aislantes para los negocios.
Mariana Martínez Reyes, diseñadora gráfica y dueña de esta pequeña empresa en el municipio de Oaxaca, junto con su esposo Andrés García, quien se encarga del taller de impresión, tomaron la decisión de darle un nuevo rumbo a su negocio, ante la necesidad y la incertidumbre por la pandemia.
“Sabíamos que esta medida no sería por una o dos semanas sino que iba a durar mucho más tiempo y teníamos que encontrar la manera para seguir trabajando, porque independientemente de los sueldos de nuestro personal, también hay gastos de la oficina que continúan y se deben cumplir”, expresó Martínez.
Tras recibir un pedido para fabricar cubos para protección durante intubación y extubación que requerían los hospitales, Mariana y Andrés tomaron esta oportunidad como una forma de seguir trabajando al emplear su ingenio para elaborar otros productos de protección y ponerlos al alcance de la sociedad.
De esta manera, decidieron fabricar caretas de protección; para lo cual se adentraron en un proceso de investigación a fin de que estas fueran de gran calidad y cumplieran con todos los protocolos de seguridad.
Así, en esta empresa donde laboran diez personas, se intensificaron las medidas de higiene y prevención como son el lavado de manos con gel antibacterial antes de checar su hora de entrada, así como portar caretas y cubrebocas en el interior del taller.
Aunque en un principio solo trabajaban con clínicas y hospitales, poco a poco sus productos también fueron adquiridos por su cartera de clientes que abarca otros negocios.
Mariana Martínez señaló que las caretas que producen -tanto para personas adultas como para niños- cumplen con todos los protocolos de seguridad, son resistentes a caídas y cómodas para portarlas por varias horas.
Además están hechas con materiales probados por la FDA (Agencia de Medicamentos y Alimentación, por sus siglas en inglés). En este sentido, el establecimiento también cuenta con servicio a domicilio, cubriendo todas las medidas de prevención.
“Todas las caretas van protegidas en una bolsa. La persona que los entrega porta también su careta, cubrebocas y lleva consigo gel. Algunos clientes nos pagan previamente, pero para quienes deciden hacerlo al momento de la entrega, procuramos llevarle el cambio completo en un sobre para evitar manipular en lo menor que se pueda el dinero”, comenta.
A más de dos meses de la contingencia sanitaria por Covid-19 que llevó a estos pequeños empresarios a ampliar su gama de producción, aseguran que la única opción que se tiene para seguir avanzando hacia esta nueva realidad, es adaptarse y evolucionar.
“Tenemos que aceptar esta nueva forma de vida, usando cubrebocas, portando una careta, lavándonos las manos constantemente. Aquí lo importante es cuidarse y tener mucha higiene. Sí todos nos cuidamos podremos evitar más contagios y estar fuera de esta situación en menos tiempo”, dijo Mariana.