Los nuevos retos del desarrollo municipal frente a esta nueva realidad generada por el Covid-19, obliga a las administraciones en este nivel de gobierno y responsabilidad pública, a replantearse cómo construir nuevos modelos de comunicación política y social que permitan fortalecer la seguridad en todos los sentidos hacia una sociedad que está reclamando respuestas objetivas y viables para contar, primeramente, con una mayor y mejor seguridad sanitaria.
En segundo término está el cómo diseñar acciones de largo alcance, que permitan una urgente reactivación económica en tanto no exista la solución de una vacuna, que nos dé a la humanidad la posibilidad de blindar nuestro sistema inmunológico, para reducir los niveles de riesgo y contagio ante una pandemia que ha transformado diametralmente la vida a nivel global, misma que ha cobrado miles de vidas y colapsado la economía al grado de generar una gran recesión que ha afectado sensiblemente a los países de menor desarrollo como es el caso de la región de América Latina, donde México se ha colocado en niveles de muy alto riesgo, situación que a llevado al colapso a millones de ciudadanos que no ven un manejo adecuado que les indique que el Gobierno está conduciendo correctamente acciones para salir de las crisis tanto sanitaria como económica.
Es en este contexto y ante esta nueva etapa de la humanidad, los gobiernos municipales deben comprender que se hace urgente llevar a cabo procesos de reingeniería institucional profundos, para construir políticas públicas, utilizando las nuevas formas que requieren de la implementación permanente en la utilización de la tecnología y la digitalización de los procesos enfocados hacia una transversalidad político-administrativa para la construcción de un buen gobierno.
En este sentido los Institutos Municipales de Planeación (IMPLANES) representan para la estructura municipal, la oportunidad de ser un área estratégica para desarrollo, basando sus acciones desde una planeación prospectiva estratégica como herramienta holística e integradora de las acciones de gobierno.
Prospectiva, planeación y estrategia son términos que deben constituirse como parte sustantiva de las agendas municipales donde los IMPLANES deben impulsar la creación de una nueva forma para gobernar, partiendo de estos tres conceptos:
La prospectiva, como un ejercicio de reflexión que intenta elaborar una pluralidad de imágenes de visiones futuras.
La estrategia, como una elección ventajosa de posibles trayectorias convenientes y las acciones coordinadas que las acompañarían para lograr un objetivo futuro.
La planeación, como una asignación programada a lo largo del tiempo de los recursos y actores responsables necesarios para operar las acciones que permitirán conseguir un cierto objetivo futuro.
La prospectiva pretende ayudar a los decisores para que éstos tomen decisiones mejor informadas proponiéndoles una variedad relevante de trayectorias de futuro. Un futuro que está abierto, incierto, indeterminado, y que no podemos conocer anticipadamente con certeza, y la elección del objetivo futuro, ese futuro por el que habrán de trabajar los decisores (a través de las estrategias, las tácticas, los planes y la acción) en el ámbito municipal.
Dentro de los IMPLANES, es indispensable impulsar la creación de una nueva cultura de construcción y análisis basada en la prospectiva, para que ésta sea percibida como un instrumento útil a la función de gobernar. En la medida que los líderes políticos y sociales reconozcan esta utilidad, será más fácil incorporar estos trabajos a la formulación de las políticas y programas. De esta manera, los estudios de prospectiva y estrategia deben entenderse como una forma moderna de planificación que sustituye a la existente, entendiendo que, “planificar significa cambiar mentes, hacer planes”.
Los IMPLANES, necesitan ser los entes transformadores del desarrollo municipal, considerando que la planeación prospectiva estratégica tiene un alto potencial revolucionario. Ante la nueva situación de una sociedad en complejidad, crisis y cambio que marcha de modo permanente hacia la incertidumbre, urge la necesidad de una planeación prospectiva estratégica que nos conduzca con mayor seguridad hacia el futuro plausible para todos, sumando en esta ruta a la Agenda 2030 con sus 17 ODS para elevar a un esquema de estandarización internacional el fortalecimiento de los Planes Municipales de Desarrollo.
El autor es Director General del Centro de Estudios para el Desarrollo de Proyectos Sociales (CEDPROS)
Presidente del Instituto Político Nacional de Administradores Públicos (IPONAP)
cedpros2014@gmail.com