El alcalde de Cuernavaca, José Luis Uriostegui, su esposa y varios funcionarios más, cayeron al fondo de una barranquilla, tras colapsar el puente colgante por donde caminaban.
El recorrido era parte de la re inauguración del puente Ribereño en una de las barrancas de Cuernavaca, por lo que había presencia de medios de comunicación e invitados.
Ante la cantidad de personas que pasaban por el puente, la estructura colapso, lo que dejó algunos heridos ya que la altura no era mayor a cuatro metros.