El gobierno municipal de Tultepec inició su campaña de concientización y entrega voluntaria de pirotecnia irregular dentro de la zona urbana a fin de eliminar riesgos de accidente y daños a terceros derivados de fuegos de artificio, misma que puede ser entregada de manera anónima para su destrucción en la Presidencia Municipal.
Juventino Luna Rodríguez, director municipal de Desarrollo de la Pirotecnia, aseguró que el objetivo es que esta actividad artesanal, símbolo e identidad de Tultepec, siga siendo sinónimo de alegría, color y expresión artística y no de tragedia, por lo que estas acciones deberán ser un acto de buena voluntad por parte del gremio pirotécnico.
Precisó que en coordinación con el Instituto Mexiquense de la Pirotecnia (IMEPI), el objetivo es regularizar al mayor número de pirotécnicos posible, para que prevalezca la actividad que da identidad al municipio, pero siempre dentro del marco de la ley, con la intención de reducir riesgos y sin exponer a terceros.
“De ahí la necesidad de evitar a toda costa cualquier riesgo hacia la población, e impedir que continúen trabajando o almacenamiento de pirotecnia en la zona urbana de manera irregular”.
Por ello para evitar cateos y posibles detenciones por estos actos que son un delito federal, se hace este llamado a los pirotécnicos en general a sacar el producto almacenado en lugares no permitidos de forma voluntaria, y entregarlo a cualquier hora, preferentemente por las noches y de manera anónima en el módulo que se instalará frente a la presidencia municipal a partir del martes 10 de septiembre.
Señaló que, para evitar cualquier contingencia, se acordonará un espacio con cinta precautoria, además de que el material será custodiado por elementos de protección civil y seguridad pública municipal, apoyados con unidades de emergencia y un carro bomba de la unidad de Bomberos municipal, mismo que será cedido a la Fiscalía General de la República (FGR) para su destrucción.
Aseguró que de manera coordinada los tres niveles de gobierno trabajan para hacer conciencia entre los pirotécnicos y advertir que habrá cero tolerancia para quienes pretendan trabajar la pólvora en zona urbana y en lugares no autorizados por la Sedena.
“Si bien es cierto que con esta actividad se ganan la vida miles de familias, lo cual es muy respetable, también deben tener claro que, si lo hacen fuera de la Ley, sin respetar las medidas de seguridad, eso constituye un delito federal que se castiga hasta con cárcel y quien sea sorprendido será sancionado”, dijo.
Juventino Luna dijo además que, como una medida de apoyo y para facilitar los trámites de regularización, desde finales de 2018 se abrió una nueva oficina de atención especial para orientar jurídicamente y llevar de la mano a quienes buscan regular su actividad, en una campaña que será permanente.
“Junto con personal del Instituto Mexiquense de la Pirotecnia (IMEPI), de manera coordinada con el gobierno municipal, se les está orientando para que no se trasladen hasta Toluca, reduciendo tiempos y costos con el objetivo de que todo aquel que trabaje con fuegos de artificio lo haga dentro del marco de la Ley”.
Por su parte, Derek Isaac Cansino Aguilar, director General del Instituto Mexiquense de la Pirotecnia (IMEPI), dijo que, para evitar tragedias derivadas del manejo de la pólvora en esta temporada, habrá mayor presencia de autoridades en los polvorines para supervisar el manejo correcto de las sustancias propias de su elaboración.
Se realizarán inspecciones de lunes a viernes de manera coordinada con las autoridades municipales en la zona de producción de La Saucera, para verificar que se cumplan con las medidas de seguridad que exige la Sedena, además de la capacitación permanente a pirotécnicos en el manejo responsable de la actividad, aseguró.
El funcionario estatal los instó a los pirotécnicos a involucrar algunas innovaciones tecnológicas, como guantes con puntas de fibra de carbono que evitan la descarga electrostática, el uso de un condensador adecuado y ropa de algodón, entre otras medidas.
“El llamado es a cambiar su forma de producir pirotecnia, ya no más de forma clandestina, sino legal, para que la pirotecnia siga siendo sinónimo de alegría, de color y de una expresión artística y no de tragedia”, concluyó.