El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general la Ley de Ingresos de la Federación para 2020, que contempla ingresos por seis billones 103 mil 317.4 millones de pesos.
Ello representa un aumento de 0.9 por ciento respecto a la propuesta enviada por el Ejecutivo federal el pasado 8 de septiembre, donde planteó ingresos por seis billones 96 mil 335 millones de pesos, elevándose en 6 mil 981.6 millones de pesos.
Asimismo, los ingresos tributarios para el siguiente año serían de tres billones 505 mil 822 millones de pesos, apenas 0.18% más que los 3 billones 499, mil 425.8 millones que planteó originalmente la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Los recursos extras provendrán de cobrar a los productores campesinos por el uso del agua, así como la eliminación de un estímulo fiscal para el transporte.
En el primer caso, la modificación se hizo en la Ley de Derechos, en la cual se eliminó la exención que tenían la industria pecuaria y agropecuaria por el uso del agua, que generaría al erario 585 millones de pesos más.
En cuanto a las modificaciones en el ISR se elimina un estímulo fiscal al diésel utilizado en transporte, lo que generaría ingresos por 6 mil 396 millones de pesos.
En la LIF, aprobada con 258 votos a favor, 104 en contra y 2 abstenciones, se mantiene una expectativa de crecimiento económico del Producto Interno Bruto (PIB) del 2 por ciento, y una cotización estimada de 20 pesos por dólar en 2019.
Asimismo, establece un precio del barril de la mezcla mexicana de petróleo de exportación de 49 dólares por barril, con la producción de 1951 barriles del hidrocarburo diarios para el próximo año.
La LIF para 2020 aprobada otorga un respiro a Pemex, IMSS e ISSSTE, que verán elevados sus recursos propios para enfrentar su déficit y buscar la estabilización.