El gobernador de Nuevo León, Samuel García, está impulsando una nueva Constitución que contempla encarcelar a quienes desobedezcan sus órdenes o le falten al respeto.
El Congreso local ya aprobó en una primera vuelta la nueva Carta Magna del estado, pese a que la medida ha sido calificada como “inquisitiva”.
El artículo 135 de la nueva Constitución de Nuevo León, en su fracción VI, señala que un ciudadano no podrá hablar mal del gobernador, incluso en redes sociales; de lo contrario, el ciudadano recibirá una multa o hasta cárcel como castigo:
“A la persona Titular del Poder Ejecutivo corresponde” (…) “Imponer multas que no excedan del importe de salarios o de un día arresto hasta por 36 horas, a los que desobedecieron sus órdenes o le faltaren al respeto debido”.