El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, pidió a la población que tenga la certeza que en la lucha contra la violencia no hay espacio para la impunidad, ni la tolerancia, puesto que los enemigos son los delincuentes, no el gobierno.
Ayer, Culiacán registró una marea de casi 10 mil ciudadanos, el doble de los que protestaron tres días antes, para exigir otra vez a gritos que llegue la paz y justicia, y que se vaya el gobernador.
En medio de la narcoguerra entre grupos del Cártel de Sinaloa que ha dejado casi mil desaparecidos y más de 800 asesinados en los últimos cuatro meses, los inconformes se vistieron de blanco y caminaron por las principales calles de la ciudad capital.
Al respecto, el mandatario indicó que a diario las fuerzas federales y estatales salen a combatir a los grupos delictivos, “hay que decir que hay un enemigo, que ese enemigo común es la delincuencia”; son ellos quienes que no solo se enfrentan entre ellos, sino que también lesionan a muchas personas”.
Rocha Moya explicó que desde el primer día que brotaron los actos de violencia, las fuerzas federales, estatales y municipales en forma coordinada a través de operativos se combate todo tipo de manifestaciones violentas.
“Nosotros vamos a seguir respetando porque somos un gobierno que no reprime, vamos a seguir respetando la libertad constitucional que tienen las personas de manifestarse, de expresarse a través de la manifestación libre”, afirmó.
“El pueblo pone y el pueblo quita (…), el pueblo te dice te puse y ya, pero luego hay mecanismos para decir: te quito. Pero es el pueblo, no es alguien que grita, no, es el pueblo”, sostuvo el mandatario.
Cuestionada sobre el gobernador Rocha Moya, la Presidenta Claudia Sheinbaum dijo hoy que no es labor del Gobierno federal poner o quitar Gobernadores.
Durante su mañanera, Sheinbaum afirmó que la labor de su Administración es proteger a las familias sinaloenses y construir la paz. “Nosotros, nuestra labor es ayudar, como Gobierno federal, para proteger a las familias de Sinaloa”.