Luego de que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, a través de la Red de Control de Delitos Financieros (FINCEN, por sus siglas en inglés), difundiera un comunicado en el que alude a instituciones financieras mexicanas en posibles operaciones irregulares, CIBanco rechazó categóricamente cualquier participación en actividades fuera del marco legal.
Con más de cuatro décadas operando en el sistema bancario nacional, la entidad aseguró que su funcionamiento se rige por estrictas normativas tanto nacionales como internacionales. Además, enfatizó que se encuentra bajo vigilancia constante de organismos como la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), el Banco de México, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB).
En su posicionamiento público, el banco señaló que ha cumplido con todos los lineamientos establecidos por las autoridades correspondientes y que no tiene relación alguna con operaciones ilícitas. La postura de CIBanco se respalda en el propio comunicado emitido por la SHCP, en el que la dependencia precisó:
“Ante ello, se solicitó al Departamento del Tesoro pruebas del vínculo de estas instituciones con actividades ilícitas que pudieran ser corroboradas por la UIF o la CNBV; sin embargo, no se recibió ningún dato probatorio al respecto”.
Según el banco, las inspecciones realizadas por los reguladores mexicanos no han detectado irregularidades que comprometan su operatividad ni su conducta institucional. Asimismo, garantizó que los fondos de sus clientes están respaldados conforme a la legislación vigente en materia de protección al ahorro.
CIBanco reiteró su disposición a colaborar plenamente con las autoridades de México y de Estados Unidos, al tiempo que agradeció la confianza de sus usuarios