Con un llamado a abrir espacios de diálogo incluyentes que reúnan a consumidores, academia, autoridades sanitarias, organizaciones civiles y especialistas, la Asociación Internacional de Edulcorantes (ISA) expresó su preocupación por el Primer Foro Internacional sobre impuestos a productos nocivos para la salud, convocado por la Cámara de Diputados.
Cualquier propuesta fiscal, señaló el organismo, debe marcar diferencia entre el consumo excesivo de azúcares y los productos formulados con edulcorantes bajos o sin calorías, recordando que estas sustancias tienen evaluaciones de seguridad de COFEPRIS, EFSA en Europa, FDA en Estados Unidos y del Comité Mixto FAO/OMS de Expertos en Aditivos (JECFA).
Si las bebidas con edulcorantes se catalogan como “nocivas” y se les impone el mismo gravamen que a las azucaradas, podría haber confusión entre consumidores, menos herramientas para reducir la ingesta calórica y un efecto desproporcionado en los hogares de menores ingresos por el encarecimiento de alternativas con menos calorías, alertó la ISA.
La asociación, mediante un comunicado, señaló: “El objetivo debe ser común: mejorar la salud de la población con decisiones informadas, proporcionales y basadas en evidencia, no con medidas que castiguen sustituciones más saludables ni con procesos que excluyan interlocutores relevantes”, y reiteró su disposición a participar en mesas técnicas y a aportar evidencia científica sobre el tema.
La reformulación responsable de productos, junto con la educación al consumidor y el acceso a información clara en el etiquetado, fue señalada por la organización como un conjunto integral de soluciones que el debate sobre impuestos debe contemplar.
Un diálogo plural antes de definir cualquier iniciativa fue el exhorto de la ISA a legisladores y a las instituciones convocantes.
“México necesita un debate plural, técnico y responsable que ponga en el centro a las personas, en especial a quienes viven con diabetes, obesidad y otras condiciones de salud, y que evalúe el impacto real de cada medida en la salud, la economía familiar y la claridad para el consumidor”, puntualizó.