La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México realizó una ceremonia solemne en la Universidad de la Policía para honrar la memoria de cinco elementos que perdieron la vida en cumplimiento de su deber a lo largo de 2025. El acto fue encabezado por el secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez Camacho, en presencia de mandos policiales, familiares y compañeros de los oficiales caídos.
Durante el homenaje, los cadetes efectuaron los tiros de salva de honor y la Banda de Guerra interpretó el toque de silencio, como muestra de respeto institucional. En el Muro de los Caídos, el titular de la SSC colocó una placa conmemorativa y encabezó una ofrenda de honor acompañado por subsecretarias, subsecretarios, directores generales, así como representantes de la Policía Bancaria e Industrial (PBI) y de la Policía Auxiliar (PA).
El pase de lista estuvo a cargo del director general de la PBI, Oswaldo Cantellano Ledezma, quien nombró a los policías Segundo Jonathan Israel Rodríguez Bustillos; Heladio Espinoza Meneses; Daniel Matías Juárez; Eduardo Juárez Hernández; y al Policía Tercero Brandon López Solís. Tras cada nombre, se escuchó el silencio solemne que marcó uno de los momentos más significativos de la ceremonia.
Luego de un minuto de aplausos, Pablo Vázquez Camacho dirigió un mensaje en el que destacó el sentido del servicio público y la vocación policial. “Cuando un hombre es guiado por su vocación, y su brújula es la lealtad y el profundo amor por la Patria y por la Ciudad, su existencia adquiere una dimensión distinta, en donde el servicio a la sociedad, y la protección de la comunidad, se convierten en su verdadero propósito de vida”, expresó.
El funcionario subrayó que el homenaje representó un acto de unidad institucional. “Es por ello que el día hoy, quienes integramos la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México nos unimos para rendir un sentido homenaje a cinco hombres Policías, Jonathan, Heladio, Daniel, Eduardo y Brandon, quienes jamás cejaron en su lucha por la paz y la justicia, y hasta su último aliento, abanderaron con nobleza y sacrificio el compromiso que nos une de manera indisoluble con la sociedad”, añadió.
Ante los familiares, el secretario entregó la bandera nacional, el kepi y la medalla representativa del Valor Policial Post Mortem. En ese contexto, enfatizó: “qué mayor entrega, que ofrendar incluso la propia vida cumpliendo la encomienda que da sustento a nuestra Institución; qué mayor valentía, que hacer frente cada día a quienes atentan contra la sociedad y ejercen la violencia en nuestra Ciudad. Así lo hicieron ellos, defendiendo su uniforme sin dar marcha atrás, enarbolando hasta su último acto de servicio, los ideales más nobles, las causas más justas y los principios más profundos que guían a nuestra Institución”.
La ceremonia concluyó con el sobrevuelo de un helicóptero de la agrupación Cóndores, desde el cual se arrojaron pétalos de rosa en señal de gratitud y reconocimiento a los policías caídos, cuyo legado —se señaló— permanece como referente de vocación y compromiso con la seguridad de la ciudad.












