El miércoles se llevó a cabo en el Zócalo de la Ciudad de México, el “AMLOFest 2021” con motivo de los tres años de gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Durante su discurso, el Presidente destacó el avance en la vacunación COVID-19, la entrega de becas a estudiantes y adultos mayores, finanzas públicas sanas y suficientes, el no aumento de la electricidad y la gasolina, así como el acuerdo para aumentar el salario mínimo en un 22% para el siguiente año, principalmente.
López Obrador es el segundo presidente mejor evaluado a tres años de gobierno, solo por debajo de Carlos Salinas de Gortari, quien para esas fechas contaba con el 77% de aprobación.
Además, según datos publicados por el periódico El Universal, en la encuesta trimestral realizada por Buendía&Márquez, AMLO tiene una aprobación del 68%, según estos resultados subió seis puntos porcentuales en relación con la medición del trimestre anterior, por lo que es la cifra más alta registrada en los últimos dos años.
Un dato importante que este estudio arroja, es la notoria brecha entre los ciudadanos que aprueban la gestión y quienes no: los que cuentan con estudios universitarios y los que no, dividiéndose en 50/50 respectivamente.
Tomando en cuenta las políticas sociales del gobierno, los programas y apoyos sociales no solo son la principal bandera del Presidente, sino su activo más importante, lo que contribuye a que permanezca en un buen nivel de aprobación.
Sin duda, otra de sus cartas fuertes ha sido la comunicación: su capacidad para instalar la narrativa de que este, es el gobierno al servicio del pueblo, de los más desprotegidos.
Además, ha construido a través de las conferencias matutinas, una poderosa estrategia comunicativa que marca día a día la agenda en el país. La línea es muy clara, todo aquel que se opone a las políticas de su gobierno es exhibido como aliado de las élites económicas y enemigo del pueblo, ellos y nosotros.
En resumen, es de aplaudir el amplio respaldo ciudadano con el que el Presidente llega a la mitad de su mandato; sin duda, esto será de gran influencia en las próximas elecciones del 2022 donde se renovarán seis gubernaturas: Tamaulipas, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Aguascalientes, y donde dicho sea de paso, el partido al que pertenece AMLO es el favorito.