La candidata del PRI a la gubernatura de Chihuahua, Graciela Ortiz, declinó hoy a favor de la abanderada del PAN-PRD, Maru Campos, a fin de fortalecer un bloque que haga frente a Morena para evitar que llegue al poder.
“Ciertamente aquí estamos los mejores hombres y mujeres para gobernar el estado, pero no somos ahorita los que tenemos la posibilidad de real de llegar”, admitió.
La ahora ex abanderada priísta llamó a sus correligionarios hacer un esfuerzo de responsabilidad con Chihuahua, con la gente y con el partido para ir en ese frente con el PAN para impedir que la gubernatura de la entidad pueda llegar a manos de Morena.
No obstante, instó a los candidatos priístas a presidentes municipales, diputados locales y federales a continuar con su lucha , porque tienen una posibilidad real de ocupar los cargos públicos que aspiran.