La Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados aprobó hoy el dictamen del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2026, el cual comenzará a discutirse a partir de mañana en el pleno de San Lázaro.
Luego de una sesión que se desarrolló en poco más de tres horas, en una atmósfera de tensión y rispidez –incluso entre los propios morenistas-, la comisión avaló la propuesta de gasto público para el año entrante enviada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo por 39 votos en favor, de Morena y sus aliados, y 15 en contra, de PAN, PRI y MC.
En el inicio de la sesión se registró un jaloneo por el control de la sesión, cuando el secretario de la comisión y vocero de la bancada, Arturo Ávila (Morena), quiso darle una salida al tema de las batichicas y le dio la palabra al petista Reginaldo Sandoval, pero interrumpió a la presidenta de la comisión, Merilyn Gómez Pozos, de su partido.
Molesta, Gómez Pozos le cerró el micrófono a Ávila y le espetó un “estoy yo”. El vocero morenista acusó recibo del gesto de su compañera de bancada y optó por salirse de la reunión y ya no regresó ni siquiera a votar.
En tanto, el diputado del PAN, Héctor Saúl Téllez, lamentó que en el presupuesto enviado por el Ejecutivo al Congreso hay un recorte de más de 10 mil millones de pesos (mdp) en seguridad, en particular en rubros como los fondos de Aportaciones para la Seguridad Pública y el de Aportaciones para el Fortalecimiento de los Municipios.
“Menos recursos en seguridad provoca la precariedad de las policías municipales y estatales. Lo de Uruapan fue porque hay un completo abandono, y refleja lo que pasa en el país, donde unos 2 mil 500 municipios sufren hoy por la seguridad. Esas son las consecuencias de dejar en el abandono a los presidentes municipales”.
“Hay menos recursos en seguridad, menos recursos en el fondo de aportaciones a la seguridad pública. Y eso únicamente lo que provoca es la precariedad de las policías locales, municipales y estatales. Lo que pasó en Uruapan fue un completo abandono, lo que pasó en Uruapan refleja claramente lo que pasa en el País: hay cerca de 2500 municipios en nuestro país que están sufriendo hoy por la inseguridad y porque este Gobierno recortó el Fortaseg”, sostuvo.
Al anunciar el voto en contra de su bancada, el legislador acusó que tal como se plantea, el de 2026 es un presupuesto hipotecario, porque plantea un techo de endeudamiento de 1.8 billones de pesos, con lo que el saldo aumentará de 10.5 billones en 2018 a 20.3 billones en 2026.
La emecista Gloria Núñez coincidió en que lo vivido en Michoacán, deja claro que el rubro de seguridad debe dejar de verse como un gasto discrecional y convertirse en una verdadera prioridad en el presupuesto de egresos.
Agregó que no basta con destinar recursos, sino que se debe garantizar que éstos se enfoquen en resultados, a fortalecer a las corporaciones municipales y a alentar la coordinación entre los tres niveles de Gobierno para garantizar la seguridad de las comunidades y sus familias.
Núñez advirtió que 18 de los 27 ramos administrativos registran reducciones en términos reales, entre ellos salud, medio ambiente, desarrollo agrario, cultura, refugios para mujeres y turismo, entre otros.
El legislador priísta Mario Zamora aseveró que el presupuesto para el año entrante es “histórico, pero porque nos va a endeudar como nunca antes había pasado en México”. Sostuvo que hay un “abandono” al campo mexicano y se han hecho recortes a sectores a seguridad y salud, cuyo funcionamiento se pone en riesgo.
Zamora dijo en tono sarcástico que “ojalá haya muchas batichicas, pero apoyemos en el presupuesto a Omar García Harfuch”, frase que motivó a Andrea Navarro (Morena) a acusarlo de falta de respeto y señalar, con molestia: “No somos batichicas, somos diputadas o señoras diputadas”. En ese momento, fuera de micrófonos, se alcanzó a escuchar al vicecoordinador Alfonso Ramírez Cuéllar responderle a su correligionaria: “ustedes tienen la culpa, ¿para que se nombran así?”
	    	










							
							



