El Partido Acción Nacional (PAN) en la Ciudad de México rechaza el vandalismo como herramienta para exigir derechos y lamenta la inacción del Gobierno de la CDMX ante la destrucción del patrimonio de todas y todos los mexicanos.
Andrés Atayde, presidente del PAN en el CDMX recordó que “el día de su toma de protesta, la Jefa de Gobierno afirmó que el cuerpo de ganaderos había desaparecido, y una vez más, por lo que vimos ayer nos mintió. Por tanto, sería prudente que nos explicaran a las y los ciudadanos si existen ‘otros datos’ sobre estos nuevos policías.
“Ayer, ante el vandalismo perpetrado por grupos anarquistas a monumentos y establecimientos, la Dra. Claudia Sheinbaum no tuvo más remedio que llamar a una fuerza especial antimotín que no es otra cosa más que el Cuerpo de Granaderos, pero lo peor es que resultó ser inoperante y meramente observador.”
Por lo que preguntó al Gobierno de la Ciudad “si se supone que desapareció el cuerpo de granaderos ¿Cuál es el objetivo de que los policías con equipo antimotin ayer estuvieran presentes ¿sólo eran observadores?”.
Las autoridades capitalinas solo se limitaron a observar y no cumplieron con su obligación de restablecer el orden público y proteger el patrimonio histórico de la Ciudad de México, así como a distintos establecimientos mercantiles.
“En el PAN de la Ciudad de México reprobamos los hechos violentos registrados la tarde de ayer y pedimos a las autoridades no eludir su responsabilidad. Una cosa es el derecho a la libre expresión y manifestación y otra, muy distinta, alterar el orden público poniendo en riesgo la integridad de las y los capitalinos.”
Tal parece, que hoy, dijo Atayde, “hay permiso para destruir la propiedad ajena. Se pintaron monumentos históricos, se rompieron vidrios, se quemó una librería y golpearon la puerta Mariana. Se nos prometió una ciudad segura y hoy estamos peor que antes”.
En el PAN de la CDMX creemos que sí hay de otra y que se deben reconocer los errores y tomar decisiones efectivas por parte del gobierno, con estrategia y no solamente acciones reactivas que poco o en nada ayudan a solucionar la crisis de seguridad que vivimos todos los días.