Alrededor del mediodía, cientos de estudiantes salieron del Monumento a Lázaro Cárdenas con dirección al Palacio de Gobierno. Al llegar al Centro Histórico comenzó el caos, los gritos, las consignas y posteriormente las confrontaciones entre los jóvenes que llegaron y los uniformados que resguardaban el recinto gubernamental como cada movilización.
En este lugar un grupo de manifestantes intentó entrar al palacio de gobierno y elementos de la policía estatal lanzaron gases para dispersar a los manifestantes.
Hasta el momento las autoridades no habían informado sobre el número de detenidos.
La situación se tensó cuando los policías comenzaron a intentar dispersar a los manifestantes lanzando gases lacrimógenos, desde diferentes puntos para separar y alejar a los presentes.
	    	










							
							



