La participación de Petróleos Mexicanos (PEMEX) en la venta nacional de Gas Licuado de Petróleo (LP) experimentó un crecimiento significativo del 25% entre 2020 y 2023, según datos proporcionados por la empresa estatal. En 2020, la comercialización de gas LP por parte de PEMEX cubría el 49.7% de la demanda nacional, alcanzando el 62.1% en el año pasado.
El director general de PEMEX, Octavio Romero Oropeza, atribuye este aumento a una mayor producción y a la implementación de una estrategia de ventas efectiva. La Reforma Energética de 2014 abrió el mercado de distribución de combustibles, incluido el gas LP, a empresas privadas, lo cual afectó la participación de PEMEX. Sin embargo, la empresa estatal ha logrado recuperar terreno en los últimos años.
Cabe destacar que tan solo en 2023, la producción de este combustible aumentó 11% con una producción promedio anual de 102 mil 300 barriles diarios, mientras que en 2022 la producción ascendió a 92 mil 200 barriles por día.
A lo largo del año pasado, PEMEX abasteció más de 160 mil barriles diarios del gas LP y de los 27.8 millones de hogares que se estima consumen este combustible, poco más de 17 millones consumen el que distribuye la petrolera mexicana.
La recuperación del mercado del gas LP por parte de la empresa productiva del Estado tiene que ver con su política de autosuficiencia energética, por lo que ha implementado acciones para mejorar el abastecimiento de todos los combustibles y, en el caso específico del gas LP, el 31 de agosto de 2021 PEMEX lanzó la empresa pública Gas Bienestar, la cual inició con la distribución de tanques de este combustible, en la alcaldía de Iztapalapa, en la Ciudad de México.
De septiembre de 2021 al cierre de 2023, Gas Bienestar ha distribuido alrededor de 3 millones de cilindros en la Ciudad de México y trabaja en poder llevar esta distribución a otros estados del país.
El Gas LP en México es muy importante, pues es el principal combustible doméstico ya que más del 70% de los hogares lo consumen, en este sentido la entrada de Gas Bienestar en el mercado de la distribución busca poner un freno al alza en los precios de este producto, el cual es dominado por empresas privadas que han sido señaladas de incurrir en presuntas prácticas monopólicas regionales.