La diputada del Partido Acción Nacional (PAN), Claudia Montes de Oca, presentó ente el Congreso de la Ciudad de México una iniciativa de reforma la Ley de Educación local, con la finalidad de que las autoridades capitalinas visibilicen y atiendan los trastornos de la educación que se presentan, en la mayoría de las ocasiones, en primaria, secundaria y bachillerato.
En su exposición de motivos, la legisladora manifestó que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) alrededor de 10% de la población presenta un trastorno educativo, tales como dislexia, discalculia (dificultad para el aprendizaje de matemáticas) o déficit de atención con hiperactividad, principalmente.
Mencionó que la medida contempla que las autoridades locales, principalmente la Secretaría de Educación, cuente con las herramientas para atender, tanto a los menores como a los padres de familia, para identificar cualquier padecimiento de este tipo, así como otorgar la ayuda profesional para solucionarlo.
la Diputada Montes de Oca señaló que los trastornos del aprendizaje suelen estar sub-diagnosticados, por lo que son muchos más los niños que padecen estas dificultades.
“De no ser diagnosticados y atendidos oportunamente, los trastornos del aprendizaje en niñas y niños pueden provocar consecuencias graves en su desarrollo como la deserción escolar, la obtención de malas calificaciones, así como episodios de depresión, estrés y ansiedad en la escuela. Eventualmente, si estos trastornos no son tratados, pueden reducir significativamente las oportunidades profesionales y laborales durante la adultez”.
La reforma a diversos artículos de la Ley de Educación de la Ciudad de México plantea proporcionar a las niñas y niños con trastornos del aprendizaje los materiales, apoyo didáctico y ayudas técnicas necesarias para brindar una educación de excelencia”.
“Con relación a la educación inclusiva se establece que la Secretaría proporcionará capacitación, consejería y orientación a madres y padres de familia o tutores que lo requieran para atender a educandos con algún tipo de discapacidad, trastornos del aprendizaje, con dificultades de comportamiento o de comunicación, o bien con aptitudes sobresalientes”, precisó la diputada.
Mencionó que la mayoría de estos casos en los menores de edad no son identificados, por lo que quienes los padecen sufren de algún tipo de discriminación, estigmatización y bullying escolar, por lo que es necesario atenderlo de una forma integral.