Que aunque lo nieguen y señalen a Morena, en el Partido Acción Nacional también hay autoritarismo. Pues resulta que, el pasado jueves, personal de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) acudió a la sede nacional blanquiazul, ubicada en la alcaldía Benito Juárez, por decenas de denuncias anónimas de trabajadores contra su Secretario de Comunicación, Max Cortázar, por “fumar todo el día, a todas horas, en espacios libres de humo”. El personal federal le colocó letreros hasta en su oficina para que se apegue a la ley, o de lo contrario clausurarán el partido. Pero, una vez que los responsables de la Cofepris se marcharon, el buen Max quitó los letreros y amenazó a los quejosos que seguirá fumando. Por lo que los trabajadores panistas se preguntan si su líder nacional, Jorge Romero, seguirá tolerando este tipo de acciones, pero sobre todo escándalos, por este tipo de situaciones.
