En entrevista con el periodista Jenaro Villamil, transmitida por el programa Versiones Públicas del Canal 14 del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, el magistrado electoral de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Felipe de la Mata Pizaña, calificó como exitosa la elección judicial celebrada el pasado 1º de junio, al tiempo que denunció intentos de presión por parte de lo que describió como una “oligarquía” dentro del Poder Judicial.
Durante la conversación, el magistrado aseguró que este grupo de poder ha buscado intervenir no sólo en la reciente elección judicial, sino también en los comicios presidenciales y en la conformación del Congreso de la Unión.
Frente a los señalamientos críticos provenientes de exconsejeros, analistas y comunicadores vinculados con la oposición, De la Mata defendió la labor del TEPJF: “El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación es una institución sólida”, afirmó. Añadió que las sentencias emitidas por la Sala Superior se han apegado al marco jurídico vigente, pese a las campañas mediáticas en su contra.
Uno de los casos más señalados fue la resolución sobre la integración del Congreso, decisión que provocó fuertes cuestionamientos y señalamientos de que se habría favorecido a Morena con la mayoría legislativa. De la Mata negó cualquier irregularidad y subrayó que el criterio adoptado ya había sido utilizado en procesos anteriores, incluyendo el de 2018.
“Se intentó doblar al Tribunal Electoral”, reconoció el magistrado, quien aseguró que, en respuesta, el órgano optó por reafirmar su autonomía y actuar conforme a la legislación electoral. Un ejemplo de los embates que enfrentaron fue una resolución emitida por un juez de distrito, la cual pretendía que la Sala Superior designara a dos magistraturas vacantes de 2024. “La pregunta aquí es: ¿lo habrá hecho solo u orquestada?”, planteó. Y añadió: “El juez extralimitó sus funciones, así de claro”.
También mencionó una contradicción de criterios promovida ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en un intento de invalidar la decisión del Tribunal sobre la asignación de diputaciones plurinominales. Otra escena que llamó su atención fue la aparición de la jueza Karina Ibarra en un foro académico, donde criticó en tono exaltado la misma resolución. “El intercambio educado y con argumentos siempre será bien recibido”, respondió De la Mata.
Sobre los múltiples intentos judiciales para frenar la organización de la elección judicial mediante suspensiones, el magistrado fue contundente: los amparos no son procedentes en materia electoral, por lo que el proceso no pudo ser detenido.
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación es la máxima autoridad en materia electoral. No es la Corte, recalcó De la Mata, haciendo énfasis en los límites competenciales entre ambas instituciones.
Aunque confesó que no está de acuerdo con la elección por voto popular de los jueces, reconoció que el proceso fue democrático. En sus palabras: “Nadie puede negar que, al final, fue un proceso democrático”.
El magistrado subrayó el carácter inédito de la elección judicial, señalando que no hay antecedente de una experiencia similar en una nación de esta magnitud. A su juicio, este ejercicio representa un paso hacia una mayor democratización del Poder Judicial, ya que las personas juzgadoras fueron electas como resultado de decisiones tomadas por representantes populares elegidos por la ciudadanía.
Pensando en el futuro, De la Mata consideró que hay áreas de mejora para la elección judicial de 2027. Sugirió revisar el diseño de la boleta, sustituir el método de la tómbola por un sistema basado en puntajes que tome en cuenta trayectoria y profesionalismo, e incluso analizar la viabilidad de implementar el voto electrónico.
Al cierre del programa, el magistrado señaló que México es una gran nación, que la ciudadanía debe ser vigilante del actuar de las y los jueces electos, por lo que debemos tener esperanza del futuro por venir.