El presidente Andrés Manuel López Obrador reafirmó su decisión de retirarse de la vida pública cuando termine el sexenio, por lo que, si lo necesitan, con mucha pena, se negará.
“Si abro la puerta, ya no la voy a poder cerrar”, dijo en su conferencia matutina en Palacio Nacional.
El mandatario dijo que el seguir participando en política “era parte de la pensión” de los expresidentes, pero que en su caso no será así, y compartió que recibirá una pensión de 25 mil a 30 mil pesos mensuales.
También hizo un recuento de su trayectoria laboral en el Instituto Nacional Indigenista y en el Instituto Nacional del Consumidor, pero “cuando me fui de candidato a Tabasco en 1988, mi expediente desapareció e hice un trámite especial en el ISSSTE para que me reconocieran ese tiempo”.
“Fui cinco años jefe de Gobierno y llevo cinco años como presidente. Por esos 20 años de servicio y mi edad, ya tengo derecho a una pensión del ISSSTE de aproximadamente 25 mil o 30 mil pesos mensuales”, señaló.
López Obrador comentó que recibe ingresos por la venta de libros y dijo que esos los maneja su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, junto con los sueldos. Y aseguró que con la pensión le alcanzará para vivir en Palenque, donde la vida es barata, estará solo, no necesita trajes y usará huaraches.